El Rayo Sanluqueño derrotaba al Racing Portuense por el resultado de 3-2 en el último partido que disputó antes de que se suspendieran todas las competiciones por la propagación del coronavirus, no sólo en el fútbol sino en el resto de deportes en España y en buena parte del mundo.
La victoria sacaba a los rayistas de los puestos de descenso y con los ánimos más elevados para enfrentarse ejerciendo como visitante a la Juventud Sanluqueña en el Doro Stadium pero este interesante derbi de rivalidad local quedó como es lógico aplazado.
Al estar El Picacho cerrado por motivos de seguridad los entrenamientos no se pueden realizar y más porque se recomienda que todas las personas permanezcan en sus domicilios salvo casos urgentes o más que necesarios.
El entrenador del Rayo Sanluqueño, Nani, manifestó que “le he dicho a mis jugadores que hagan los ejercicios físicos que puedan para que pierdan la menos forma posible. Lo importante es la salud de todos y más que una pesadilla lo que pienso es que la gente no se cree la realidad que está viviendo. Pienso que la Liga continuará cuando acabe todo esto porque me imagino que habría que jugar miércoles y domingo. Para el fútbol mundial sería una catástrofe que este problema no se solucione. Esto no es un cachondeo, hay mucha gente muriendo”.
De su localidad, Trebujena, dice que “salvo la farmacia, el supermercado y poco más todo está cerrado. Es lo que se esperaba ante la expansión de este virus”.
Espera que antes o después esta situación se solucione. En lo deportivo y en lo que queda de temporada señala que “el objetivo que nos propusimos para afrontar este tramo final de temporada era salvarse pero el fútbol, ya digo, lo dejo en un segundo término. Lo que me preocupan son las personas, mi familia y que todo se solucione porque la situación sigue siendo muy preocupante”.