El concejal del PP, José Loaiza, ha señalado que actualmente hay hasta 55 farolas fundidas en la calle Real desde Borrego hasta la Iglesia Mayor, según ha sido corroborado por ellos mismos durante un paseo realizado en ese tramo de la arteria principal de la ciudad en la noche del pasado domingo.
Así lo ha dado a conocer este martes durante una comparecencia de prensa que ha ofrecido junto al armario técnico del tren tranvía ubicado justo delante de la Compañía de María. Loaiza ha recordado que “en el mes de noviembre llevamos una moción al Pleno del Ayuntamiento donde, entre otras cosas, se hablaba de estos armatostes y de las condiciones que ha permitido el actual equipo de gobierno para que la Junta de Andalucía campe a sus anchas con respecto a las obras del tranvía. Ahí se nos dijo que se había llegado a un acuerdo para trasladar este armatoste que está justo delante de un edificio constitucional como es el colegio de la Compañía de María. Pues bueno, a día de hoy, no tenemos noticia de qué se ha hecho con esa moción y no sabemos si se va a trasladar, o en qué condiciones se van a hacer”.
El edil popular ha indicado que en el próximo Pleno van a reclamar que se le dé contestación y cumplimiento a la moción presentada en este sentido el pasado mes de noviembre. “Queremos saber qué conversaciones se han llevado a cabo entre el Gobierno municipal y la Junta de Andalucía y, sobre todo, a qué acuerdo han llegado porque de momento se siguen montando estos armatostes y en cualquier punto de la calle Real sin control”.
El ex alcalde recuerda que durante su gestión al frente del Ayuntamiento ordenó la paralización del montajes de los armarios. “Estuvimos hablando con ellos durante las comisiones técnicas de que había fórmulas para retirarlos, pero ellos no querían hacerlo y paralizamos el montaje hasta que llegó la señora Cavada que le ha dado manos libres a la Junta para hacer lo le dé la gana”.
Por otro lado, Loaiza ha denunciado también que ya existen grietas en las zonas que se arreglaron de la calle Real con hormigón. “La última obra vuelve a ser un desastre y demuestra una vez más falta de gestión de la Junta a la hora de controlar los materiales que se ponen”.