Sin embargo, y afortunadamente, existe un ramillete de jóvenes artistas que, picados por el gusanillo del cine, decidieron emprender una aventura detrás de las cámaras y ahora exponen en todo el mundo, y con bastante éxito, sus obras. Son campogibraltareños y llevan a gala su denominación de origen pues todos han mostrado, más de una vez, en la gran pantalla la belleza de este trocito de tierra tantas veces denostado y muchas veces incluso desconocido para los propios ciudadanos autóctonos.
Alexis Morante, Juan Manuel Díaz Lima, Luis Melgar, Ángel Gómez, Raúl Santos, Diego Arjona... o como en el caso de Víctor Clavijo, que triunfa delante de las cámaras y que el año pasado fue premiado por la Unión de Actores por su papel en La Señora, además de ser nominado a los Goya al mejor actor revelación en 2004 por El regalo de Silvia.
Los protagonistas
Alexis Morente (Algeciras, 1978) ha comentado que “la industria del cine, en general, está bien, aunque evidentemente la crisis también se nota, como en el resto de industrias. En cuanto al Campo de Gibraltar, industria como tal no hay pero sí que hay muchísimo talento joven haciendo cine y haciéndolas muy bien, como Diego Arjona, Raúl Santos, Ángel Gómez, Víctor Clavijo, Luis Melgar...”.
“Yo he rodado he rodado varios videoclips allí recientemente, trabajando con gente de la zona, con gente de Algeciras… y lo que sí digo es que la comarca es un escenario único. Lo mismo ruedo en Los Ángeles con americanos, que en Algeciras con campogibraltareños, que son igual de buenos”, destaca.
En cuanto a apoyos, “siempre he tenido la suerte de contar con la Delegación de Cultura, o con Juventud, aunque aún estoy pendiente de lo que acordamos. El mayor apoyo que recibo es de la gente en general, mucho cariño, cuando proyectamos allí se llenan las salas, si hay que rodar nos abren las puertas de todas las localizaciones que necesitamos... Eso es lo más importante”.
Sobre sus actuales proyectos, “tengo entre manos muchas cosas. Acabo de grabar en Madrid un videoclip con Enrique Bunbury, hace muy poco estuve en Algeciras grabando otro, en este caso con Niños Mutantes, ambos tienen que salir en marzo y hace poco se ha estrenado un mediometraje Licenciado Cantinas, también con Bunbury y ahora estoy metido en una postproducción de un documental de este cantante y en la escritura de un largometraje, y sobretodo volver a Los Ángeles y seguir la aventura”.
Juan Manuel Díaz Lima (Algeciras, 1976) ha señalado que “ahora mismo la industria está mal por el tema económico principalmente pero a mi entender sigue teniendo el mismo problema de siempre y es que se hacen muchas películas. De hecho España puede ser uno de los países donde más películas se ruedan y producen, lo que pasa es que al final no se estrenan ¿Por qué? Quizás por la crisis, que le gente no va al cine y el final no se estrenan. También está el caso de las subvenciones. Antes había muchas y eras fáciles de conseguir y luego incluso no se estrenaban. Ahora va a ser más difícil hacer cine porque no hay subvenciones pero curiosamente ahora con la crisis a lo mejor es el momento de hacer películas”.
En cuanto a la comarca, “hay mucha gente que se dedica a esto. Cuando yo empecé éramos dos o tres, ahora nos sorprenderíamos de conocer cuantas personas del Campo de Gibraltar se dedican a esto, en diferentes posiciones. Mucho ha tenido que ver las carreras de Comunicación Audiovisual, que o no había o había poca. Ahora hay en Sevilla y Málaga”.
“Hay cantera y sobretodo, talento. No sólo en cine, sino en música, pintura... Me ha pasado de ir a rodajes y muchos de los que trabajan son del Campo de Gibraltar” dice con alegría.
En cuanto al apoyo, “para rodar no hay problemas. Yo no he tenido nunca apoyo económico pero sí que te dejan escenarios, te facilitan el trabajo... Eso en Madrid es impensable en cuanto a si quieres, por ejemplo, cerrar una calle. Hay que pedir una permiso a uno, luego a otro… En la comarca por suerte eso no pasa por lo que se suple el apoyo económico con otras cosas”, destacando que “el Campo de Gibraltar es un escenario único un plató extraordinario. Casi todo lo que he hecho lo he rodado allí. Se pueden hacer muchas cosas, hay muchos contrates y a mi personalmente me encanta la Bahía”.
Ángel Gómez (Algeciras), nos ha desvelado que está “trabajando en dos cortometrajes, en Y la Muerte les seguía, un western del oeste pero ambientado en un thriller, de suspense y misterio, algo que nunca antes se había hecho; luego estoy con Pertenecemos a la muerte, de terror también, con Elisa Moglia (Águila Roja) y javier Botet (Rec), que acaba de rodar con Del Toro El Hobbit”.
En cuanto a la industria, “la crisis se nota una barbaridad. Se hacen cosas pero contadas. Es difícil encontrar subvenciones, de hecho Y la muerte le seguía tenemos 3 coproductores, ayudas de empresas y gente privada. Los festivales se están cayendo y otros reduciendo sus premios, pero hay que buscarse la vida y curiosamente en estos momentos me enfrento al proyecto más ambicioso de mi vida. Verdaderamente hay que tener muchos amigos y tirar de ellos en plan colaboraciones”.
Gómez destaca que “en la comarca hay mucho talento, una barbaridad para ser una zona que por no tener no tiene ni cines ni una escuela específica. Lo único que hay es Artis-7 que hace sus talleres. Es una zona que tendría que tener más oferta y es elogiable la gente que sale. Mis cortos, aunque sea poco, los hago en la comarca. Es que es magnífico, una localización perfecta, con muchísima variedad y juego, con playa, campo, ciudad, montaña...”.
Luis Melgar (Algeciras, 1982) ha indicado que “actualmente estamos en un momento muy complicado. Hay muchos frentes abiertos, con el cambio de legislación, con una reducción drástica de subvenciones y la pérdida de las inversiones por parte de las televisiones; también que la gente va poco al cine aunque pienso que no es así y más a las películas españolas, donde hay directores que se están atreviendo con otras cosas. El terror español, por ejemplo, es un referente fuera”.
“La comarca es fantástica para rodar, con muchos paisajes diferentes en pocos kilómetros. La lástima es que no hay una industria y tenemos que salir fuera. Hay mucho talento, esa es la verdad. Y ahí estás los resultados de Alexis, Angelito... Las cosas van muy bien”.
Candidato a los Goya
El Campo de Gibraltar y más concretamente Algeciras estarán representados en la gala de los próximos premios Goya del cine español, a través de la cinta 30 años de oscuridad, nominada a la mejor película documental.
Pese a que ninguna producción de la comarca ha logrado ser seleccionado por la Academia de Cine Español, 30 años de oscuridad, producción netamente andaluza, cuenta como esqueleto con el trabajo de un algecireño: Ismael Pinteño.
La película, dirigida por el onubense Manuel Hidalgo, ha sido producida por La Claqueta junto al estudio Pizzel 3D e Irusoin. Esta cinta competirá junto a El cuaderno de barro, de Isaki Lacuesta; Morente, de Emilio Ruiz Barrachina; y Escuchando al juez Garzón, de Isabel Coixet.
30 años de oscuridad narra la historia de Manuel Cortés, antiguo alcalde de la localidad malagueña de Mijas que no pudo escapar tras el final de la Guerra Civil y estuvo escondido durante treinta años en un hueco que él mismo y su mujer abrieron en una de las paredes de su vivienda para evitar ser fusilado.
Esta es la historia de los llamados topos de la posguerra, que tuvieron que sacrificar una vida entera para huir de la represión.
La cinta cuenta con la colaboración de los actores Juan Diego y Ana Fernández, que han prestado su voz e imagen a los personajes de esta historia.
Y han prestado sólo su voz y su imagen porque el documental recurre a la animación como narrativa, a través de dibujos que recrean a los conocidos actores, así como al resto de personajes.
El papel que desempeña el algecireño Ismael Pinteño es, por lo tanto, el propio aroma de la película, ya que ha sido la persona que se encargó de dibujar todos y cada uno de los personajes que salen en la misma, incluyendo a Juan Diego y a Ana Fernández. El resto de integrantes del equipo de animación se dedicó a otros aspectos de la misma, como el color o la pintura.
Ismael Pinteño, artista algecireño de treinta años, estudió Animación en Valencia y Bellas Artes en Sevilla. Profuso trabajador de diversas exposiciones e ilustrador de varias publicaciones, es la primera vez que he trabajado en un proyecto de esta envergadura.
Pinteño aún no se ve ganando la estatuilla aunque recuerda que “retratar en diferentes edades a Juan Diego y Ana Fernández fue un gran reto, ya que Juan tiene ahora mismo 70 años y en algunas escenas tenía 30, y sólo contaba con vídeos actuales exclusivos para el documental. Ana si está en una edad neutral, de la que sí podías envejecer o rejuvenecer sin perder su reconocimiento”.
San Roque, capital del corto
San Roque se convierte estos días y a hasta el próximo viernes 17 en la capital del cine con la celebración de la XXXIV Semana Internacional del Cortometraje. Más de 300 películas llegadas de todo el mundo se han presentado a este prestigioso concurso, de las que se han seleccionado un total de 43 para su proyección, que tendrá lugar entre el lunes 13 y el jueves 16. Se demuestra así la buena salud de un certamen que este año presenta varias novedades y cuya organización recibió el pasado sábado un premio de la Asociación de Escritores Cinematográficos de Andalucía (Asecan). En la gala final, que tendrá lugar el viernes 17, se entregarán nada menos que siete galardones.
Cintas de Portugal, Suecia, Noruega, Bulgaria, Alemania y Argentina optan al galardón final. Además, se presentaron ocho cortometrajes andaluzas, de los que se han seleccionado cinco que optarán al premio de la Radio Televisión de Andalucía, que premia al mejor realizador andaluz además de emitirse por Canal 2 Andalucía la cinta ganadora.
En la presentación oficial del certamen, realizada el pasado martes, participaron tanto el alcalde de la ciudad sanroqueña, Juan Carlos Ruiz Boix; como la teniente de alcalde delegada de Cultura, Dolores Marchena; el director de la Semana del Corto, Esteban Gallego; el subdirector de la Radiotelevisión Andaluza en el Campo de Gibraltar, Pedro García Vázquez; y el director de la Orquesta La Bohemia, Rafael Álvarez.
Precisamente la orquesta estará en la gala inaugural, donde en su concierto habrá dos partes, una primera donde se tocará una pieza que se ha creado especialmente para este concurso, con la idea de que sea su sintonía oficial, y una segunda dedicada al repertorio habitual de la agrupación.
Los premios a los que optan las cintas son: Premio al Mejor Cortometraje, dotado de 4.000 euros y trofeo; Premio Gas Natural Fenosa al Mejor Cortometraje votado por el público, consistente en 2.000 euros y trofeo; Premio Kinova al Mejor Cortometraje de Animación, consistente en el rodaje de los títulos de crédito para un cortometraje (valorado en 2.000 euros), y trofeo realizado en cerámica de Sargadelos; el citado Premio RTVA a la Creación Audiovisual Andaluza al Mejor Realizador Andaluz a juicio del jurado; Premio Cinesa al Mejor Director Español, consistente en la proyección del cortometraje ganador (35 mm) en las salas de la citada empresa. Dicho premio irá acompañado de un trofeo; Premio Asfaan al Mejor Director Andaluz, consistente en trofeo, y Premio al Mejor Sonido, trofeo que concede la empresa Marchena Sonido. El jurado podrá declarar desierto algún premio, así como conceder alguna mención especial.
Adiós al festival de Tarifa
El pasado mes de diciembre llegó la noticia, la mala noticia en este caso. Tarifa se quedaba sin su prestigioso Festival de Cine Africano (FCAT) tras ocho años siendo santo y seña para los directores del continente vecino. Y es que la asociación Al-Tarab, nacida para el desarrollo y la difusión de la cultura africana y la organización de FCA (como ahora se denomina, sin la ‘T’ de Tarifa), han decidido trasladarlo a Córdoba, que será la sede de esta IX edición.
Uno de los motivos esgrimidos es el cambio de fechas, pasando de los meses cercanos al verano, a octubre, siendo el traslado a la capital califal por temas de operatividad al mismo tiempo que abrir nuevas vías de financiación. De este modo, Tarifa, que durante ocho años ha sido el referente de un evento cinéfilo sin parangón, ve como Al-Tarab se lleva su ‘alfombra negra’ de la localidad campogibraltareña que durante esas fechas que duraba el certamen llevaba el cine a cada rincón del municipio, espacios cuanto menos curiosos como el Mercado de Abastos, la Biblioteca Mercedes Gaibrois, la Casa de la Cultura, el salón de actos del colegio Guzmán, el Teatro del Liceo o el Castillo de Guzmán el Bueno.
