Las importaciones de crudo a España alcanzaron en 2019 los 66,3 millones de toneladas, lo que representa una caída del 1,9% con respecto al año anterior, aunque suponen la segunda cifra más elevada desde que se tiene datos, tan sólo superada por los 67,586 millones de toneladas de 2018, según datos de la Corporación de Reservas Estratégicas de Productos Petrolíferos (Cores).
Nigeria, con el 16,9% del total, fue el principal país origen del crudo importado, seguido de México (14,2%) y Libia (12,8%), que aumentó sus importaciones un 19,6% con respecto a 2018.
En lo que se refiere a las importaciones de crudo de los países de la OPEP, en 2019 incrementaron su cuota hasta el 60,8% y aumentaron sus suministros un 1,3% con respecto al ejercicio anterior. Ascendieron las importaciones de crudo de Irak, con un repunte del 12,5%, y de Arabia Saudí (+10,1%), cuarto suministrador en 2019 con el 12,4% sobre el total.
En lo que se refiere a diciembre, las importaciones ascendieron a 5,469 millones de toneladas, con un descenso del 1,9% con respecto al mis mes de 2018.
Por primera vez desde febrero, el principal suministrador de crudo en el mes fue México, que aumentó un 8% interanual. A continuación, se situaron Libia (862.000 toneladas), con las importaciones más elevadas en seis meses, y Nigeria (819.000 toneladas), que cayeron un 29,9%.
Las importaciones de crudo de los países en el mes cayeron un 11,5% frente a diciembre del año anterior, y supusieron el 53,3% del total, el menor porcentaje en 11 meses.