Cádiz es la tercera provincia andaluza con mayor número de disoluciones matrimoniales en 2015, con 2.473 de las 17.959 del total de la región. Se trata de los últimos datos elaborados por el Instituto de Estadística y Cartografía de Andalucía, que especifican que 2.334 fueron divorcios, 134 separaciones, y 5 nulidades en el caso del territorio gaditano.
En el primero de los apartados, el de los divorcios, sí se ha observado en consecuencia una reducción respecto a los 2.471 producidos en el 2014; también en las separaciones (161 el año pasado) y nulidades (9).
Los números recogidos también detallan cuándo es el momento, de media, en el que se acaba el amor. Así, atendiendo a la frialdad y a la objetividad de los números, la duración media del matrimonio antes de la disolución es de 17 años en Cádiz.
En este capítulo la provincia se sitúa en un término medio regional, “empatada” en el cuarto puesto andaluz con Jaén. Eso sí, las pistas que dan los números apuntan a que los enlaces que perduran más de media en el tiempo antes de la ruptura final son, por este orden, Granada (17,4 años de media) y Córdoba (17,3).
Donde el cariño tiene la fecha de caducidad más temprana es Almería: 15,9 años de media. En general, en Andalucía, la duración media de los matrimonios disueltos fue de 16,7 años.
El Instituto de Estadística y Cartografía de Andalucía señala también que si el amor ciego a la hora de no mirar ni los pasaportes del cónyuge, también lo es a la hora de dar carpetazo a los flechazos que un día se dieron personas de distinta nacionalidad, ya que se produjeron 172 divorcios en 2015 en los que algún cónyuge era extranjero.
En lo que se refiere a los matrimonios entre españoles, 2.162 de ellos acabaron en divorcio el año pasado, de los 2.334 que hubo en ese periodo en Cádiz.
En la mitad aproximadamente del montante total de los casos de ruptura de la provincia, 1.086 en concreto, la petición de finiquitar la relación vino firmada por ambos miembros.
En cuanto a las rupturas en este apartado en parejas del mismo sexo, se dieron en la provincia gaditana 22 divorcios, de los 117 habidos en 2015.
Estas cifras convierten a la provincia en la segunda con más separaciones que lamentar, seguida de Málaga.
Donde hay menos malas noticias sentimentales en este sentido es Córdoba, con solo 4 casos. A nivel andaluz hubo solo dos separaciones, ambas en Granada.
A nivel andaluz y teniendo en cuenta de nuevo todas las opciones sexuales, el 44,6% de los divorcios se produjeron en matrimonios que no tenían hijos menores, mientras que en el 28,2% existía un único hijo menor de edad y en el 24% existían dos. En el caso de las separaciones, el 50,7% no tenían hijos menores, el 23% tenían un único menor y el 19,3%, dos menores.
El total andaluz de disoluciones representó una tasa bruta de 2,14 por cada mil habitantes, por debajo de la tasa nacional, que se situó en 2,18 por mil.