El Cristo de la Expiración, antigua imagen atribuida a José Tomás de Cirartegui, y restaurada recientemente por Pedro Manzano, recorrió anoche las calles de la feligresía de la castrense de San Francisco. Los sones de música de capilla acompañaban al crucificado, portado por hermanos y feligreses.
El Vía Crucis recorrió las calles Real, Almirante Faustino Ruiz, Colegio Naval Sacramento, Cecilio Pujazón, Calderón de la Barca, Sánchez Cerquero, General Valdés, Alameda Moreno de Guerra, Real y a su templo.
A la finalización, la imagen fue entronizada en su paso, esperando ya la salida procesional del próximo Jueves Santo.