El agua que se consume en los hogares, comercios e industrias, una vez usada, es conducida a través de de la red de alcantarillado y de las Estaciones de Rebombeo de Aguas Residuales (EDAR) para ser procesada y reciclada.
Las Estaciones Depuradoras de Aguas Residuales (EDAR) juegan un papel fundamental en el ciclo del agua. En ellas se procesa y recicla el agua antes de retornarla al medio natural. La construcción, operación y mantenimiento de estos sistemas son complejos y muy costosos, pero la calidad de nuestro medio ambiente depende de ello.
Las EDAR permiten eliminar las contaminaciones físico-químicas y biológicas, y se clasifican según los procesos de los que se disponen: tratamiento primario, secundario y terciario.
El proceso de eliminación de la contaminación en las EDAR con tratamiento primario se fundamenta básicamente en la sedimentación. Las que tienen tratamiento secundario, además del proceso anterior, añaden una etapa biológica.
El funcionamiento de una EDAR sigue un proceso que podemos dividir en siete fases. La primera de ellas es la que se encarga de realizar el desbaste de sólidos. Para ello, se cuenta con unas rejas de gruesos (eliminan sólidos grandes tales como: palos, maderas, etc.) y unas rejas de finos (eliminan sólidos y desechos pequeños, tales como: telas, papel, madera, etc.). La segunda fase es la del desarenado y desengrasado. En el primer caso se lleva a cabo la eliminación de arenas y sólidos pesados, y en el segundo la eliminación de grasas y flotantes.
En tercer lugar se lleva a cabo la decantación primaria, que permite eliminar la materia en suspensión. Este proceso se compone de tanques de sedimentación donde la reducida velocidad de desplazamiento del agua permite que la materia en suspensión sedimente por acción de la gravedad. El fango generado se elimina desde el fondo del decantador. Igualmente, se recoge la espuma y flotantes de la superficie.
A continuación se procede al tratamiento secundario (o biológico), que tiene como objetivo eliminar la contaminación orgánica de las aguas residuales. Este proceso se desarrolla en tanques aerado donde se forma un fango activado con microorganisamos que asimilan la materia orgánica biodegradable.
En quinto lugar se realiza la clarificación o decantación secundaria, que tiene como objetivo separar el fango activado del agua.
De ahí se pasa al tratamiento terciario, que tiene en cuenta si el agua tratada se incorpora a un cauce receptor catalogado como sensible y/o protegido, o va a ser reutilizada con fines agrícolas (riego), se procede a un tratamiento de afino, filtrando y desinfectándola. En último lugar se realiza el tratamiento del fango. El fango es el subproducto de la depuración de las aguas residuales. Se genera por los tratamientos primarios (fango primario) y secundario (fango biológico). El fango se deshidrata para facilitar su transporte hasta el vertedero o su transformación en abono orgánico para uso agrícola.
Casos prácticos
La ciudad de Chiclana cuenta con dos estaciones depuradoras, una de ellas en el casco urbano (El Torno) que inició su actividad en el año 1.986, y la segunda en la zona de la costa (La Barrosa), puesta en marcha en 1.991. Estos dos centros de depuración tienen una capacidad de tratamiento diario de más de 25.000 metros cúbicos de caudal, y la gestión y el mantenimiento de ambas estaciones depuradoras están subcontratados con la empresa Aqualia, Gestión Integral del Agua.
A este respecto, Chiclana Natural ha venido trabajando en los últimos años en la modernización y mejora continua de los procesos de depuración de aguas residuales de ambas edares.
Ambas instalaciones disponen en la actualidad de sistemas terciarios de depuración, y el tratamiento de las aguas residuales en las mismas permite garantizar que su vertido posterior o reutilización para el riego, cumple con las exigencias legales vigentes.
En el caso de Jerez, partimos de su propia red de saneamiento, ya que, tanto en la ciudad como en los restantes núcleos del término municipal, la red de alcantarillado es unitaria, es decir, que por ella circulan tanto las aguas residuales procedentes de viviendas, industrias y equipamientos como las de escorrentías derivadas de las lluvias. En general, los conductos principales del alcantarillado discurren por el trazado de los antiguos cauces de arroyos, que se han ido entubando a medida que el suelo urbano los alcanzaba.
La red cuenta con todos los elementos necesarios: conducciones, emisarios, aliviaderos, sumideros, arquetas, etc, que posibilitan la recogida de las aguas residuales y pluviales y conducirlas por gravedad hasta las estaciones de tratamiento, evitando los olores y facilitando el mantenimiento. La longitud total de la red necesaria de alcantarillado de Jerez Ciudad y núcleos urbanos, es de 631,37 Km.
Por lo que respecta a la depuración de aguas residuales, se consigue mediante su adecuado tratamiento en la EDAR Guadalete, situada al Sur del casco urbano, junto al río Guadalete. Para conseguir que todos los efluentes de la ciudad lleguen a dicha instalación, existen fundamentalmente dos emisarios que bordean la ciudad. El emisario Oeste que discurre por el antiguo arroyo de Curtidores y paralelo al arroyo de Morales en su tramo inferior y el Emisario General, que bordeando la ciudad por el Este conecta las Cuencas Centro y Norte a través de los Emisarios de Canaleja y de La Granja.
La EDAR Guadalete es una depuradora bioquímica mediante el denominado proceso de lodos activados, dotado con un tratamiento físico-químico previo como sistema para laminar elevadas cargas orgánicas.
La ciudad de Jerez aporta, según la época del año, dos tipos de carga contaminante. Durante diez meses al año la contaminación se puede considerar como normal, mientras que los restantes dos meses, coincidiendo con la vendimia, es alta, siendo la carga contaminante estimada para su diseño, en términos de DBO5, equivalente a la producida por una población de 776.400 habitantesoriginada por actividades domésticas, conforme al criterio de la CEE de que un habitante equivalente produce 60 gr de DBO5 al día).
La EDAR es capaz de tratar adecuadamente todas las aguas residuales admitidas a la red de saneamiento de la ciudad y los núcleos próximos a ésta. El agua tratada, salvo la reutilizada previo tratamiento terciario para la limpieza de la EDAR y riegos de zonas verdes y equipamientos, se vierte ya regenerada al río Guadalete sin afectar a los diversos ecosistemas que allí existen.
A la EDAR Guadalete por su cercanía, bien directamente por gravedad o mediante bombeo, se incorporan los vertidos de determinadas entidades locales autónomas y núcleos rurales periféricos a la ciudad. Los restantes núcleos disponen de tratamiento de depuración independiente o autónomo. Existen viviendas abastecidas que por su dispersión en la campiña de Jerez, no pueden incorporar sus aguas residuales a los sistemas de alcantarillado, por lo que se les requiere que dispongan de tratamiento particular adecuado, en general, fosas de decantación digestión o sépticas, que deben limpiar, trasladando sus lodos en camiones cisternas a la EDAR Guadalete.
Agua y energía
Los último y más importantes avances en el campo de aguas residuales apuntan a la eliminación de la contaminación de las aguas y a la generación conjunta de energía eléctrica. Aqualia, por ejemplo, ha impulsado el proyecto All-Gas, que busca transformar los efluentes de las EDAR en biomasa y la transformación de esta biomasa en biogás, dentro del esfuerzo dirigido hacia la reducción de la dependencia energética de los combustibles fósiles -el objetivo de l UE es que en 2020 un 20% de la energía producida en Europa provenga de energías renovables.
Tratamiento de compostaje en Jerez
En el caso de Jerez, el tratamiento que reciben las aguas residuales posibilita la total reutilización en la agricultura de los lodos generados por la depuración. Estos lodos, previa digestión en la EDAR y su adecuada deshidratación, son transportados a una planta de compostaje, existentes junto a la plantas de tratamiento de residuos sólidos urbanos, denominada Las Calandrias, a unos 3 Km. de la Edar. Todos los lodos generados en las plantas o estaciones de depuración de los restantes núcleos del término son transportados e incorporados al proceso de digestión de lodos de la EDAR Guadalete, siendo sometidos al mismo hasta su evacuación a la planta de compostaje. En la planta de compostaje, los lodos son extendidos en las distintas eras existentes hasta que su grado de sequedad permite su manipulación y formado de pilas o caballetes, para que, con la temperatura adecuada, se produzca el proceso de compostaje. A este proceso se incorpora toda la biomasa (poda de árboles y residuos de jardinería) generada en Jerez, sirviendo estos residuos de estructurante, lo que facilita y acelera el proceso de maduración y compostaje.