Las cifras de nuevos contagios que estamos viendo en los medios de comunicación nos hacen pensar que posiblemente se haya relajado considerablemente la situación sin tener en cuenta que los no vacunados eran aún una mayoría importante. Es decir, esa tan anunciada inmunidad de grupo nunca se ha producido habida cuenta del alza de la tasa de contagiados que se está viendo en el conjunto del país.
Es cierto que en Andalucía todavía estamos en cifras totalmente asumibles pero, ese medio millón de personas sin vacunar pueden representar un serio peligro para la salud pública de nuestra sociedad.
No entiendo a los negacionistas. A quienes quieren eliminar cualquier tipo de restricción o de norma controladora de la propagación del virus. Los datos que estamos viendo en países como Austria o Alemania invitan a hacer una reflexión acorde a la necesidad de seguir extremando las precauciones a todos los niveles.
En nuestra Comunidad Autónoma lo hemos hecho bien. Hay una alta tasa de vacunados, se han seguido en mayor medida que en otros territorios todas esas obligaciones que derivan restricciones de horarios o de movilidad.
Ahí están unos resultados que sin ser definitivos en cuanto a solución del problema (aunque haya un solo contagiado debería ser la preocupación primordial de los ciudadanos y de las Administraciones Públicas), sí vienen a ofrecer una posición ventajosa frente a otros territorios donde las recomendaciones y obligaciones han sido más laxas.
El propio Consejero de Salud de la Junta de Andalucía ha indicado que se va subiendo de forma lenta, sobre todo comparado con el resto de regiones de España, pero de forma sostenida, lo que hace que estén muy preocupados, sobre todo viendo la evolución en otros países europeos.
Dependemos del turismo y que no vengan alemanes, por ejemplo, es un auténtico trastorno para las cuentas de resultados de hoteles y otros establecimientos relacionados con el ocio de los ciudadanos.
Por tanto, necesitamos un esfuerzo adicional para seguir combatiendo el virus. Esta batalla no está ganada, aún nos queda mucho esfuerzo compartido para poder superar una pandemia que nos ha traído muchísimo sufrimiento, muchísimos fallecidos y demasiados hospitalizados.
Tenemos que hacer esta labor compartida de prevención en honor a todos ellos y para que estas cifras no suban en exceso. Lamentablemente fallecidos va a seguir habiendo. Esto es incuestionable. Por ello, cuantos menos sean mejor.
Como siempre les digo, sigamos siendo responsables por nosotros y por todos.
