Con el azul y el amarillo de la bandera ucraniana, pero también con los colores de la Senyera, la pirotecnia Tamarit de Alfarrasí ha teñido este martes el cielo de Valencia en su mascletá, que ha concebido como un homenaje antibelicista y solidario al cumplirse el primer aniversario de la invasión rusa.

La mascletá, con 172 kilos de material pirotécnico, ha comenzado a las dos en punto de la tarde con una traca valenciana que ha dado paso a una secuencia de truenos terrestres digitalizados y a las banderas, a lo que ha seguido el sonido de las sirenas y truenos aéreos.

Cinco fases de truenos terrestres han ido incrementando su ritmo y su potencia hasta fundirse en un terremoto final terrestre con cuatro fases y un bombardeo aéreo.

"Queremos dedicarla al pueblo valenciano por toda la ayuda que ha dado al pueblo ucraniano", ha destacado el pirotécnico Daniel Tamarit, que ha aludido al "vínculo especial" que su empresa tiene con Ucrania.

No es la primera mascletá de carácter solidario que ha previsto Tamarit, que en 2020 tenía planeado estrenarse en la plaza del Ayuntamiento de Valencia con un disparo dedicado a Chernobil, que tuvo que ser suspendido por el viento días antes de la cancelación total de las Fallas por la pandemia.

INVITADOS Y PARTE SANITARIO

Este alegato antibelicista lo han podido ver los miles de asistentes a este espectáculo, pero también los invitados al balcón del Ayuntamiento, que este martes han incluido al impulsor de la campaña 'Soy mayor, no idiota', Carlos San Juan, la presidenta y la plantilla masculina del Valencia CF y el equipo masculino del Valencia Basket.

También han sido invitados el jefe del Estado Mayor del Cuartel General Terrestre de Alta Disponibilidad, Enrique Silvela, la presidenta de la Audiencia Provincial de Valencia, Esther Rojo, el diputado Jesús Salmerón, el senador Emilio Argüeso y el director del Museo de Bellas Artes de Valencia, Pablo González Tornel.

Según Cruz Roja, en esta mascletá se han producido 33 atenciones, la mayoría (veinticuatro) por lipotimias aunque también por crisis de ansiedad (cuatro).

Se trata de la última mascletá de las "prefallas", la semana anterior a los cinco días grandes de la fiesta, que comienzan este martes por la noche con la plantá de los monumentos infantiles en las calles.

Le seguirán unos días con los hoteles en "lleno técnico" y un tiempo que va a acompañar a la fiesta prácticamente toda la semana en las primeras Fallas en tres años sin medidas anticovid.