El Papa ha pedido este domingo, día de la Ascensión, que "por favor" el mundo no se acostumbre a los conflictos, la guerra y la violencia, al recordar la situación en la "martirizada" Ucrania y en Sudán tras el rezo del Regina Caeli.
"Por favor, no nos acostumbremos a los conflictos y la violencia, no nos acostumbremos a la guerra, por favor. Y sigamos estando cerca del martirizado pueblo ucraniano", ha pedido desde la ventana del Palacio Apostólico tras el Regina Caeli, que sustituye al Ángelus en periodo pascual.
El Pontífice también ha instado a la comunidad internacional "que no escatime en esfuerzos para hacer prevalecer el diálogo" en Sudán.
El director de la oficina de prensa del Vaticano, Matteo Bruni, confirmó este viernes que el Papa ha confiado al presidente de los obispos italianos, el cardenal Matteo Zuppi, la tarea de mediar por la paz en Ucrania.
El Pontífice considera de esta manera que el presidente de la Conferencia Episcopal Italiana, el cardenal Matteo Zuppi, viaje a Kiev para mantener conversaciones con el presidente ucraniano Volodímir Zelenski para mediar con los presidentes de Ucrania y Rusia y tratar de cimentar un alto el fuego en el conflicto. Con todo, el Vaticano ha matizado que "el calendario de tal misión, y sus modalidades, se están estudiando actualmente".
Este nuevo gesto diplomático se enmarca en la misión de paz secreta que anunció Francisco durante el vuelo de regreso de Budapest el mes pasado. El Papa subrayó entonces: "Estoy dispuesto a hacer todo lo que haya que hacer. Además, ahora hay una misión en marcha, pero todavía no es pública. Vamos a ver cómo... Cuando sea pública la diré".
La confirmación del Vaticano del encargo a Zuppi llega un día después de que el Dicasterio para las Iglesias Orientales del Vaticano negase la involucración de su máximo responsable, el arzobispo Claudio Gugerotti, en la misión secreta del Papa para lograr un alto al fuego en Ucrania.