Bares y comercios, pero también templos religiosos, han sido los principales protagonistas del primer día de la fase 1 de la desescalada del estado de alarma por la pandemia de coronavirus, aunque la incorporación ha sido a medio gas, incluso en el uso de los transportes públicos, y la llamada a la prudencia ha tenido que venir hasta de los hosteleros, que han avisado que denunciarán a los incumplidores, ante algunas concentraciones detectadas y que han llevado, incluso, a la Policía Local a cerrar establecimientos (como el popular Jota) ante la concentración de personas, sin guardar la debida distancia de seguridad y mantener las medidas de protección, que había en su interior.
Ha sido el presidente de la Asociación de Hosteleros de Sevilla, Antonio Luque, quien ha pedido a su sector que cumpla con la limitación, durante estas dos semanas, del 50% el número de veladores permitidos a cada negocio y ha avisado de que denunciarán “al hostelero que no cumpla con lo establecido y colaboraremos con todo lo que necesite al respecto Juan Carlos Cabrera, el delegado de Seguridad y Movilidad del Ayuntamiento”, ha aseverado.
Luque, que ha estimado que han abierto unos mil bares de los 4.500 negocios hosteleros y unos 8.000 de la provincia, emitía el contundente comunicado tras reunirse con el delegado de Hábitat Urbano, Antonio Muñoz, y con los técnicos de la Gerencia de Urbanismo, para conocer los criterios para las solicitudes de ampliación excepcional y temporal del espacio de la terraza y del número veladores. Así, se permite alcanzar acuerdos con fachadas colindantes para ocupar parte de su espacio con veladores, siempre y cuando no se obstaculicen los accesos y salidas de portales, locales, garajes, salidas de emergencia, etcétera, ni se invada la senda peatonal. Además, tendrá que haber una autorización expresa, aunque siempre manteniendo los itinerarios peatonales accesibles existentes.
También, si la terraza linda con el carril bici, la separación será de 20 centímetros, y se debe respetar la separación de 1,5 metros a otros establecimientos o servicios públicos, mientras que en plazas, bulevares y similares sólo podrá ampliarse la terraza si se garantiza el uso público, que prevalece sobre el hostelero. En cualquier caso, el incremento de superficie ocupada siempre deberá ser en proporción al número de veladores por encima del 50% que se autoricen.
Tras el encuentro, los hosteleros de Sevilla se han mostrado agradecidos y han “aceptado todas las propuestas” del Ayuntamiento para “trabajar de esta primera fase de la desescalada y hasta la tercera”. “Para nosotros es muy importante que se pueda ampliar la zona para los veladores, siempre y cuando el hostelero respete la normativa que se nos ha facilitado. Lo que no permitiremos es que el que no cumpla con las normas perjudique al hostelero honrado”, ha enfatizado.
Los hosteleros de Sevilla han aprovechado la ocasión para buscar apoyos en el Ayuntamiento de Sevilla, para reclamar en conjunto a la Junta de Andalucía la modificación del decreto 155, normativa autonómica que “está impidiendo que se otorguen nuevas licencias de veladores, y en consecuencia, provocando que se paralice la actividad económica, destruyendo cientos de empleos”.
Comercios sí, pero no hoteles
En cuanto al comercio, Tomás González, presidente de la Confederación Provincial de Comercio y Servicios de Sevilla (Aprocom), ha manifestado que “muchos comercios han abierto” y “conforme avance la semana, se van a ir incorporando” más negocios hasta alcanzar ese 75 u 80 por ciento del total de establecimientos susceptibles de reabrir merced a la fase uno. “Día a día, se irá viendo cada vez más comercios abiertos”, ha augurado el presidente de Aprocom, reiterando que “muy pocos” dueños de tiendas están optando por “esperar un poco” para recuperar la actividad.
No obstante, ha avisado de que la “recuperación” de la actividad y las ventas “va a ser lenta, gradual”, tras casi “dos meses cerrados a cal y canto” por el estado de alarma. “Va a costar trabajo recuperar un ritmo medio normal” de clientela y ventas, ha opinado, abogando por “dejar que transcurran los días y que el público vaya teniendo confianza” en acudir a las tiendas.
Y sobre todo, Tomás González ha llamado a actuar siempre con “responsabilidad ciudadana” para acudir a las compras respetando la distancia social y cumpliendo todas las prevenciones dictadas por las autoridades frente a la pandemia.
Los que apenas han abierto son los hoteles. El presidente de la Asociación de Hoteles de Sevilla, Manuel Cornax, ha informado de que apenas una decena de establecimientos han abierto sus puertas ante las limitaciones de movilidad de los ciudadanos. Cornax ha detallado a Europa Press que los establecimientos que abren son principalmente los de menores dimensiones, mencionando tres pensiones, tres apartamento turísticos, un hotel de dos estrellas y otros dos de tres estrellas de pequeño tamaño y sólo uno de cuatro estrellas, el Hotel MA Sevilla Congresos, que sí presenta unas mayores dimensiones, a los que se unen los cinco “hoteles refugio” que se han mantenido abierto.
Según Cornax, “mientras más pequeño es el establecimiento, menores costos tiene para abrir, pero los más grandes tienen que pensarlo muy bien”, apuntando que las cadenas que tengan más de un hotel irán abriendo de forma escalonada conforme vayan viendo la demanda y se vayan llenando. “En este momento, no tiene sentido abrir. Es imposible”, ha sentenciado.
Los mercadillos esperarán
Los que seguirán confinados por ahora serán los mercadillos. La Comisión de Comercio Ambulante de Sevilla ha acordado “por unanimidad” no reanudar los mercadillos, de momento, a petición del propio sector y hasta que pueda garantizar las condiciones de protección sanitaria contra el Covid-19.
Los empresarios y autónomos de la venta ambulante han traslado al equipo de gobierno que no pueden cumplir todas las exigencias de protección sanitaria recogidas en el BOE, según ha informado el Ayuntamiento en un comunicado, en el que destaca que se trata de una medida de “cautela” hasta que haya garantías para la salud de comerciantes y clientes.
En este sentido, la comisión está formada por distintas áreas y servicios del Ayuntamiento, los grupos municipales y asociaciones de este sector. “Son los comerciantes quienes nos han trasladado que no reúnen, actualmente, esas condiciones para garantizar la actividad con plenas garantías”, ha explicado el delegado de Economía, Comercio, Relaciones de la Comunidad Universitaria y Área Metropolitana, Francisco Páez.
En concreto, esa decisión afecta a once mercadillos, entre ellos, los del Polígono de San Pablo; Torreblanca; Tamarguillo; Charco de la Pava y San Jerónimo, con 2.130 puestos, en su conjunto. Páez ha asegurado que el gobierno mantendrá el contacto con el sector y realizará una evaluación constante de la situación para establecer el momento en el que puedan reanudar su actividad.
“Confiamos en que pueda ser cuanto antes, con el fin de que puedan volver a registrar ingresos a lo largo de las fases de la desescalada que se ha este lunes tras el parón obligado durante los dos últimos meses”, ha añadido. Así, las medidas aprobadas por el Ayuntamiento prevén expresamente para la venta ambulante una exención de tasas por la ocupación de puestos en mercadillos, suspendidos con carácter general tras el decreto de estado de alarma.