El fiscal ha elevado a definitiva su petición de 25 años de cárcel por un delito de asesinato y el juicio ha quedado pendiente del veredicto del jurado popular
La Fiscalía de Sevilla ha afirmado que los tres acusados de asesinar a otra mujer en La Rinconada, entre ellos dos hermanas que eran cuñadas de la víctima, actuaron "por mera y pura maldad", mientras que los encausados han reiterado su inocencia y han pedido que se busque a los culpables.
El juicio contra C. N. S., R. N. S. y F. J. M. R., para quienes el Ministerio Público ha elevado a definitiva su petición de 25 años de prisión por un delito de asesinato, ha quedado pendiente del veredicto de un jurado popular después de la última sesión, celebrada este viernes en la Audiencia Provincial de Sevilla.
En el uso de su derecho a la última palabra, la primera acusada ha recordado que su novio y varios familiares políticos son "payos", por lo que la condición de paya de la víctima no era importante para ellos, mientras que su hermana ha pedido a los miembros del jurado "que hagáis justicia", igual que su exnovio y también procesado.
La víctima falleció el 19 de abril de 2016 como consecuencia de una agresión en la que llegó a recibir 25 golpes y 61 cuchilladas, según ha recordado el fiscal en su informe, en el que ha negado que se tratase de un robo por parte de otras personas porque "en la casa había 200 euros y nadie se los llevó".
La acusación pública ha resaltado que dos testigos protegidas identificaron a los encausados en la misma sala y que el hecho de que la primera de ellas apuntase primero a otra hermana, E. N. S., en un reconocimiento fotográfico y dos años después señalase a C. N. S. no es relevante, ya que "no ha olvidado lo esencial" y "cara a cara no ha dudado nada".
"Los tres tenían un conflicto con ella por su condición de paya y por su hija, le propinaron una brutal paliza y le causaron un enorme sufrimiento. La pudieron haber matado con menos golpes", ha señalado el fiscal.
"Ejecutaron la acción a traición. Lo que menos esperaba la víctima era que la asesinaran las familiares de su marido, aunque se llevase mal con ellas", ha añadido.
También ha recordado que los acusados no quisieron responder a sus preguntas y ha indicado que "sólo los culpables no declaran".
Respecto al hombre, que aseguró que no pudo conducir el coche de la presunta huida porque no tiene carnet, el fiscal ha replicado que la Guardia Civil estaba investigando a F. J. M. R. por drogas y "sabía que conducía" ese vehículo.
Las defensas han recordado que dentro de la casa no se hallaron huellas ni restos de ADN de los acusados y han criticado que la investigación "fue a lo fácil" tras oír a los testigos.
La vecina que identificó a los tres procesados "puede ser la más honrada del mundo, pero se está equivocando", ha dicho la abogada de R. N. S.
"Las testigos no han venido a mentir, pero han fabulado y se han dejado llevar por la presión social", ha agregado el letrado de F. J. M. R.
La jueza ha informado al jurado de que iba a excluir de la causa la declaración de un guardia civil que compareció como testigo y que estuvo dentro de la sala durante otra testifical, por lo que su testimonio queda invalidado.