El XVII barómetro, elaborado por el Centro Andaluz de Prospectiva y la Fundación Cámara de Sevilla, muestra un mayoritario rechazo a la ampliación de la zona azul, con una oposición del 72,8% de los entrevistados, especialmente en la zona de Nervión, donde el rechazo alcanza el 80,5%, medida que tiene menos aceptación entre los jóvenes que entre la población madura.
El barómetro, correspondiente a julio pero elaborado en junio y que ha incrementado hasta las 600 las entrevistas realizadas, también recoge que casi la mitad de los sevillanos, el 47,9%, considera que la situación de la ciudad no se ha visto modificada en el último año.
Tres de cada diez encuestados piensan que la ciudad ha sufrido un empeoramiento en el último año, 8,1 puntos porcentuales menos que en enero de 2014, mientras que uno de cada cinco opina que ha mejorado, el 21,3%.
El 45,2% de los sevillanos consultados consideran que la situación económica mejorará en el próximo año, porcentaje que en el anterior barómetro fue del 33,3%, y un 42,1% creen que no se producirán cambios visibles en la situación económica en el próximo año y un 10% que empeorará, lo que hace un año pensaban el 13,7%.
Respecto a la gestión del Ayuntamiento, el transporte público (6,8 sobre 10), los parques y jardines (5,8) y los centros de enseñanza (5,8) siguen siendo los aspectos mejor valorados por los entrevistados. Los sevillanos se muestran más críticos con la gestión de las viviendas de protección oficial (4,8) y con la limpieza la ciudad (4,8), los únicos aspectos que descienden respecto al anterior barómetro.
Zona azul, por barrios
El barómetro de la Cámara de Sevilla también refleja que el 72,8% de los entrevistados rechazan la ampliación de la zona azul y sólo un 16,4% la acepta, frente a un 10,8% que no se pronuncia.
Por barrios, el mayor rechazo a la zona azul se registra en Nervión ( 80,5%), seguido de cerca por Sevilla Este, Cerro Amate y Macarena Norte. Donde menos rechazo cosecha es en Los Remedios (59%) y Triana (61%), mientras que en la zona Sur (Bami), el porcentaje sería similar a la media, un 70,2%, al igual que en otros como Macarena (71%).
Sobre la operación urbanística de Altadis, el 54% de los encuestados la respalda, porcentaje que se eleva al 84,6% en el barrio de Los Remedios. El cambio de usos en la antigua comisaría de La Gavidia para ubicar un centro comercial, el 39,4% la apoya, pero el 30% prefiere “otros usos”, como el de centro cultural o centro cívico.
En cuanto al cambio de la pasarela peatonal que uniría Torneo con la Cartuja por un puente para el tráfico rodado, el 73,9% apoya la iniciativa, el 15% se opone y el resto no se pronuncia. Todo ello en un marco en el que el 59,5% de los encuestados valora positivamente la situación del tráfico en la ciudad, toda vez que un 36,3% la suspende.
El paro, el problema
El 59,1% de los sevillanos consideran el paro el principal problema de la ciudad, lo que supone un 9,1% menos que hace un año, y le siguen la limpieza (9,3%), la crisis económica (6,1%), los aparcamientos (4,3%) y el abandono de los barrios (3,7%), según el barómetro socioeconómico de julio de 2014.
La preocupación por el paro también bajó en el penúltimo barómetro de enero de 2014, cuando era del 64,9%, según los datos de la encuesta telefónica elaborada con 600 personas entre el 23 y el 30 de junio.
El problema de la limpieza ha aumentado respecto a enero pasado y ha bajado en relación a hace un año; el de la crisis económica también ha descendido ligeramente en los dos últimos barómetros, mientras que ha subido respecto al problema de los aparcamientos y el abandono de calles y barrios.
Siete de cada diez sevillanos consultados utilizan habitualmente el transporte público para desplazarse por la ciudad, el 18,6% en Sevici, y todos los transportes están bien calificados, con el metro a la cabeza (7,58 puntos sobre 10), cercanías de Renfe (7,19), metrocentro (7,15), sevici (7,05) y el autobús (6,97).
Además, la mitad de los sevillanos encuestados afirman que se irán este verano de vacaciones (52,7%) frente al 39,5% que no lo harán, y a medida que aumenta la edad del encuestado disminuye la proporción de los que se irán de vacaciones.
