La Universidad de Sevilla (US) ha anunciado el inicio de la fase de ornamentación y recolocación del mobiliario en los Jardines del Prado, según el proyecto acordado con el Ayuntamiento de Sevilla, en el espacio que debe recuperar la configuración previa al iniciado y fallido complejo de la arquitecta Zaha Hadid para ubicar en esta localización la Biblioteca Central de la sede académica, en una decisión finalmente tumbada por los tribunales.
En cuanto a la fase empezada este martes, la US ha señalado en una nota que consiste en la construcción de las redes de infraestructura, cerramientos, solados de urbanización y otras obras similares, trabajos previos a la posterior plantación de los árboles que aún quedan por reponer.
Las primeras especies de árboles se repusieron en el mes de mayo; en concreto, las de mayor tamaño, dejando para el otoño el resto de plantaciones al considerarse que es la época más adecuada para dicha labor. Por tanto, las obras del proyecto de demolición, urbanización y reposición de árboles y mobiliario urbano en los Jardines del Prado de San Sebastián continúan "con toda normalidad".
La obligada renuncia al proyecto de Hadid obligó a ubicar la biblioteca en otra parcela. De esta manera, la US, según indicaron a Europa Press fuentes universitarias, comenzó las obras referentes a la cimentación del edificio, que se ubicará en la avenida de Eritaña, junto a los pabellones de Brasil y México de la Exposición Iberoamericana de 1929.
Estos trabajos avanzarán en función de los fondos disponibles, principal premisa de la actual política de infraestructuras de la US ante el vigente contexto socioeconómico. Y es que las posibilidades son a día de hoy limitadas, a pesar de que son cantidades presupuestadas y con reconocimiento por parte de la administración autonómica.
NUEVA BIBLIOTECA
A finales del pasado 2012, la Comisión Ejecutiva de la Gerencia de Urbanismo de Sevilla concedió por vía urgente licencia de obras para esta iniciativa, después de que el rector de la institución, Antonio Ramírez de Arellano, presidiera el simbólico acto de colocación de la primera piedra el 4 de junio.
La problemática que propició el retraso en la concesión de los permisos municipales se sustenta en que la universidad tenía licencia para construir en este emplazamiento la sede de la Fundación de Investigación de la Universidad de Sevilla. Tras la resolución judicial concerniente a la construcción en el Prado, y a pesar de que el nuevo edificio solo precisaba de algunas reformas internas para acoger la biblioteca, se debió proceder a una tramitación de cambio de destino y petición de nueva licencia.
En cuanto a la reposición del arbolado, US y Consistorio se han reunido de manera periódica para definir los detalles del proyecto, que contempla la eliminación de los setos de matorral presentes con anterioridad a las obras y que provocaban zonas oscuras, generando suciedad y sensación de inseguridad. En su lugar, se proponen nuevas plantaciones, acordes en calidad y variedad con el diseño primitivo, que aporten más transparencia al parque y permitan una mejor contemplación del entorno y disfrute del mismo.
También se examinó la situación de los ficus dispuestos en hilera en la calle Diego de Riaño. Asimismo, se trataron otras consideraciones de tipo técnico, tales como la reconexión de las redes de riego y agua potable para fuentes.