Efectivos del Parque de Bomberos de Sanlucar tuvieron que actuar en un bloque de pisos en el Cabo Noval ante el aviso de una posible caída de cascotes desde una octava planta. Acudieron con dos camiones, uno de los mismos con una escalera elevadora.
La Policía Local se encargó de regular el tráfico y de precintar la acera de la entrada principal del edificio. Afortunadamente todo se resumió en la separación de láminas de pintura de la fachada, que fueron retiradas por un bombero desde la azotea. Esta actuación despertó una gran expectación.