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Huelva

Huelva, asediada por el fuego

La costa onubense, literalmente en llamas en un domingo negro que se cebó especialmente con el entorno de Doñana

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  • Llamas del incendio -
  • El incendio de Moguer sigue activo y obliga a miles de personas a ser desalojadas
  • La Junta baraja el origen intencionado del fuego, avivado por el calor y las fuertes rachas de viento
  • Sólo pueden desalojar a 14 de los 25 linces ibéricos del

La provincia onubense no ha podido empezar la estación de verano con peor pie. El fin de semana en que el fuego debía ser el protagonista de las hogueras de San Juan, lo ha sido precisamente por todo lo contrario, por asediar al litoral onubense y cebarse, especialmente, con el entorno de Doñana.

Así, el fuego hacía acto de presencia este sábado en Bollullos, Almonte, Hinojos y Cartaya, donde incluso hubo que cortar una carretera. Pero sin duda, la peor sorpresa la tenía reservada para Moguer, un incendio que ha seguido activo durante todo el domingo -al cierre de esta edición aún seguía sin ser estabilizado- y que se extendió a Mazagón y Matalascañas, hasta adentrarse en Doñana.

En paralelo, el incendio de en la zona de Malpica (El Rompido-Cartaya) volvía a activarse este domingo, mientras se abrían sendos frentes en la Urberosa (El Rompido) y en un asentamiento de Lepe, que tuvo que ser desalojado y que ya había sido pasto de las llamas en abril.


Crónica negra la de el último domingo de junio en Huelva, una provincia que llora por su naturaleza mientras centenares de efectivos se afanan por luchar contra el gigante del fuego, que no ha dado tregua al incendio de Moguer. De hecho, ha cumplido las 24 horas en activo y ha obligado a desalojar a unas 2.000 personas de localidades situadas en el entorno del Espacio Natural de Doñana.

El viento, cambiante y casi huracanado, ha sido hasta ahora el principal escollo para apagar el fuego, que se registró a las 21.30 horas del sábado en el paraje de La Peñuela y cuyas causas aún se desconocen, aunque no se descarta que tras el siniestro esté el factor humano.

El fuego, que ha quemado fundamentalmente pinos, ha provocado que la playa de Matalascañas haya estado temporalmente incomunicada por carretera, dejando a miles de turistas deambulando con sus bártulos, “sin poder coger sus coches y sin saber dónde ir”. A última hora de la tarde se abrió un carril de la A-483, vía de salida hacia la A-49 desde Matalascañas, para facilitar la salida de personas escoltadas por la Guardia Civil. Igualmente, pasadas las 22.00 horas se reabría también la A-494, de Matalascañas a Mazagón, en el sentido decreciente, del kilómetro 53 al 24.

Además, el fuego ha motivado el desalojo del Centro de Cría del Lince Ibérico de El Acebuche y la reubicación de los animales que alberga. Según han confirmado a Europa Press desde el Mapama, cuando se dio la orden de la activación del protocolo, “solo han tenido 15 minutos para desalojar y han conseguido sacar del centro 14 de los 25 linces que se encuentran allí” debido a las dificultades que entraña esa maniobra. No obstante, para facilitar la salida de los demás linces que no han podido evacuar, “se les ha dejado la puerta abierta para que puedan salir a su hábitat natural” en el caso de que el fuego se acercara.

La presidenta andaluza, Susana Díaz, se trasladó a primera hora de este domingo al Puesto de Mando Avanzado desde el que se trabaja contra el fuego. También los Reyes están “pendientes” de los civiles y militares que luchan contra este incendio, ha indicado en su cuenta oficial de Twitter la Casa Real.

Igualmente, el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, que también se desplazó a Moguer, destacó que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha comprometido “cuantos medios sean necesarios para que el incendio sea controlado cuanto antes”.

Más de 550 efectivos del Infoca, de la Unidad Militar de Emergencias (UME) y del Consorcio Provincial de Bomberos, con más de dos decenas de vehículos terrestres y hasta 25 medios aéreos, trabajan en la extinción del fuego.

A causa del avance de las llamas, sólo del cámping Doñana tuvieron que ser evacuadas 1.500 personas, a las que hay que sumar alrededor de 800 más del resto de infraestructuras desalojadas, como el Parador Nacional de Mazagón.

También se ha desalojado el Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial (INTA) del Ministerio de Defensa, hoteles, distintas viviendas y el asentamiento chabolista de Las Madres y la barriada de San Juan en Mazagón.

De los desalojados, alrededor de un millar han tenido que ser realojadas por el operativo de emergencia establecido en el plan del Infoca.

Quinientas personas están en el polideportivo de Moguer, 300 en instalaciones del Ayuntamiento de Almonte en Matalascañas y 150 en la aldea del Rocío, según la Junta de Andalucía.

“Con todas las precauciones del mundo, parece que hay un escenario más esperanzador”, ha afirmado el consejero andaluz de Medio Ambiente, José Fiscal, una vez que ha cambiado la dirección del viento y ha bajado su intensidad.

“Preocupación” en la zona
Cientos de vecinos de la localidad onubense de Mazagón se desplazaron durante este domingo al Puesto de Mando Avanzado para conocer de primera mano cómo avanzaban los trabajos contra las llamas. “Preocupación” por lo que pueda pasar en las próximas horas y días por el temor a que en cualquier momento tengan que ser desalojados.

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