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Luna: "Hablar de Segunda A a estas alturas creo que es algo absurdo"

El presidente del San Fernando CD, Daniel Luna, hace balance de sus seis primeros meses como presidente y habla sobre los planes de futuro para el San Fernando CD.

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  • Daniel Luna en su despacho en la sede del club. -

Daniel Luna Macías ha cumplido sus primeros seis meses de mandato al frente de la presidencia del San Fernando CD. Los comienzos no han sido fáciles para una persona que tenía el gen azulino desde la cuna, pero poco a poco ha ido superando obstáculos y, a día de hoy, se siente orgulloso de ocupar el sillón de la presidencia del equipo de toda su vida. En la siguiente entrevista hace balance de sus primeros 180 días en el cargo y, sobre todo, habla sobre el futuro de la entidad azulina.

—¿Qué análisis hace de estos primeros meses suyos como presidente del San Fernando CD?
—La verdad es que han sido bastante duros y con la necesidad de hacer muchos esfuerzos, pero me quedó con que los resultados se están viendo desde el punto de vista institucional, aunque los deportivos provisionalmente también están ahí. Resaltaría el apoyo, la constancia y el cariño con el que han respaldado a este club y a mi personalmente todos los que hoy día forman parte de él.

—¿Se ha arrepentido en algún momento determinado durante este medio año de haber cogido la presidencia?
—Arrepentirme no, pero sí es cierto que en algunas ocasiones me ha dado un poco de rabia tener que ver o soportar algunas cosas, pero no por mi que soy una persona bastante individual y autónoma, pero me daba coraje por el esfuerzo que estaban realizando toda esas personas que están aquí dentro trabajando codo con codo conmigo y por el club, que al fin de al cabo es al que representan. Por lo demás, me siento muy a gusto.

—El ejemplo más claro de la transformación que está viviendo el San Fernando como institución se puede ver en la que está usted ‘liando’ en los bajos del estadio de Bahía Sur.
—Paso a paso estamos a punto de culminar el gran sueño de este club que era poner en marcha la tienda, el museo, la sede social y las oficinas administrativas. Va a suponer un gran triunfo para todos nosotros y, lo más importante, una herencia incalculable para la entidad.

—Otro de los logros importantes es que parece que se ha reconducido la situación con el Ayuntamiento y con otras instituciones.
—El Ayuntamiento  y las instituciones con nosotros se está volcando en una época en la que la crisis económica se está cebando con todo el mundo. Un club de fútbol modesto como éste padece todavía más dicha situación. Desde el primer momento entendimos que la ayuda económica no podía ser demasiado grande, pero al menos nos han dado la posibilidad de tener herramientas para generar esos ingresos que nos harían falta para cubrir el día a día de este club.

—Un buen regalo para los Reyes Magos sería concretar ese convenio con el Ayuntamiento del que tanto se ha hablado.
—Sí y de hecho ya está cerrado prácticamente. No se ha firmado porque resta ese última pasito que es la revisión por parte de los servicios jurídicos del Ayuntamiento, puesto que ya cuenta con todos los parabienes del Patronato de Deportes, Ayuntamiento y club. Sólo queda esa revisión y la firma.

—¿Qué va a suponer exactamente para el San Fernando dicho acuerdo?
—Supone sobre todo un ahorro en el gasto anual y un apoyo institucional muy fuerte y, sobre todo, lo que le he comentado antes de que nos va a dar las herramientas necesarias para generar los recursos económicos propios con el apoyo de nuestra masa social.

—Ha hablado en varias ocasiones de la cuestión económica, ¿cómo va a ir la temporada en este sentido?, ¿creen que tendrán problemas?
—Con mucho esfuerzo, pero creemos que la deuda con la que iniciamos la temporada y el presupuestos que fijamos son totalmente salvables, de hecho ya hemos pagado la nómina de diciembre casi dos semanas antes de que se terminase el mes.

—Otro síntoma positivo de lo que se está viviendo es que la gente parece que poco a poco está volviendo al fútbol.
—La verdad es que eso es un orgullo muy grande, pero sobre todo que vayas por la calle y escuches a la gente hablar del equipo de tu ciudad. Estamos viviendo un ambiente que yo no había vivido nunca, y que sea yo la cabeza visible de la institución en estos momentos y que represente a tanta gente me lleva a causar hasta un poco de vértigo.

—Además para alguien como usted debe de ser una pasada si se tiene en cuenta que prácticamente los primeros pañales que le pusieron en su casa fueron de color azulino.
—Desde luego, desde que nací...

—Cambiando un poco el tercio hacia el ámbito deportivo, ¿calificaría de impresionante lo que está sucediendo en el terreno de juego?
—La verdad es que ha ido muy bien, pero también es cierto que  pienso que el partido de Melilla nos ha servido y mucho, sobre todo para sumar más que para restar. Durante toda la semana se habló mucho del liderato, que es cierto que el aficionado está en su pleno derecho y sobre todo después de lo que ha sufrido en los últimos años, pero nosotros dentro del club y la plantilla nos habríamos tenido que dedicar a hablar sólo del Melilla. Escuchar cosas como que el año que viene a Segunda A creo que es absurdo hablar de ello a estas alturas de la temporada. Además, todos los partidos que hemos jugado antes y que hemos ganado, ninguno ha sido fácil. Esta Liga es muy complicada, quedan todavía muchos partidos y ahora tenemos un calendario muy complicado con la visita del líder Jaén, luego del Almería B que hasta hace poco ha estado primero, y después tenemos que ir a Carranza. Aquí no hay nada fácil y para nosotros hablar de todo lo que no sea el partido siguiente es un suicidio en estos momentos.  

—La llegada de Masegosa fue una apuesta arriesgada porque nunca hasta ahora había entrenado un equipo como primero, ¿están contentos con las prestaciones que está dando?
—Muy contentos porque es una persona fantástica y un gran entrenador. Gracias a Dios el tiempo nos dio la razón cuando aguantamos el tirón cuando el equipo estaba el 18 en la quinta o sexta jornada. Confiamos ciegamente en su trabajo, en su dedicación y ofrecimiento al club en todos los sentidos. Eso es algo que no es fácil en un mundo tan complejo como es el fútbol.

—¿Cree que ha sido también pieza clave en esa profesionalización que requiere un equipo que pasa de Tercera a Segunda B?
—Era una apuesta fuerte y joven, que es la dinámica que estamos intentando implantar en este club donde hay mucha gente joven dentro de la directiva y el stage técnico. Queremos institucionalizar el club hasta el límite de que sea totalmente profesional y no tenga que depender siempre de gente amateur, y para ello los pasos son claros. El primero había que darlo con el entrenador y llegar hasta la secretaría. Tu llegabas aquí hace siete años y todavía se hacían los carnets a mano, algo que ya está olvidado. Estamos apostando por un club moderno que pueda utilizar las herramientas actuales que los tiempos te imponen, y en ello estamos.

—A nivel de la plantilla, ¿si el entrenador les pidiese algún refuerzo ahora en el mercado de invierno se lo darían?
—Estamos muy contentos con lo que tenemos, pero si tanto el entrenador como el director técnico entienden que tenemos que hacer un esfuerzo más para que venga alguien, lo haríamos siempre que estuviese dentro de nuestras posibilidades.

—¿Qué le proporciona acabar el año como segundo equipo de la provincia?
—Un subidón muy grande. Sobre todo estar terceros empatados con el segundo del Grupo IV de Segunda B. No paro de encontrarme con gente por la calle de mi misma edad que me comenta hasta la saciedad que ellos nunca se han visto en una igual. La ilusión está por las nubes.

—... pero es de suponer que estará deseando llegar a esos poco más de 40 puntos para la salvación.
—Loco porque me permitiría ponerme a pensar en otras cosas. La salvación asegurada hace que puedas trabajar en otros aspectos, ya que te quitas un peso de encima muy importante.

—Y con la cantera, ¿cómo están las cosas?
—La verdad es que muy bien y pienso que podemos presumir de tener actualmente la mejor cantera de toda la provincia sin lugar a dudas. Esos casi 1.000 niños que tenemos en la cantera poco a poco darán sus frutos. Eso sí, tenemos claro que queremos gente de club, que trabaje por esta entidad y no que vaya mirando por sus intereses propios. Es algo que nosotros mimamos con mucho cariño porque entendemos que es la esencia de todo esto. 

—¿Qué le desea a la familia azulina de cara a este 2013 que está a punto de comenzar?
—La mejor de las suertes y de las felicidades. Agradecerles desde el club y de parte de esta directiva el apoyo constante, el estar siempre ahí fiel, pase lo que pase en el campo, y que igual que ellos están con nosotros, que sepan que nosotros también estamos con ellos.
 

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