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El alcalde se pregunta "quién puñetas es Griñán para prohibir" que los alcaldes sean parlamentarios

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El alcalde de Huelva, Pedro Rodríguez (PP), ha señalado este lunes que "quién puñetas" es el presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, para "prohibir" que los alcaldes sean parlamentarios a nivel andaluz, tras ser preguntado por si se va a presentar a las elecciones autonómicas, a lo que ha contestado que "no me deja el señor Griñán".
En un desayuno informativo en el que ha analizado las líneas de actuación municipal de cara al curso político entrante, el alcalde popular ha asegurado que esta medida es "la mayor cacicada de la historia política de Andalucía, es decir que los alcaldes no se puedan presentar al Parlamento".
En este sentido, ha añadido que "no se trata del quién, sino el qué y el cuándo", porque, a su juicio, han tomado esta medida "cuando han ganado 17 parlamentarios las elecciones municipales". Por ello, se ha preguntado "el por qué no lo han hecho antes, cuando ellos eran alcaldes porque un alcalde se puede presentar al Senado, al Congreso y no al Parlamento andaluz".
Así, ha precisado que es "lamentable" que tome esta medida cuando las encuestas señalan que el PSOE "perderá la mayoría absoluta", a lo que ha añadido que por esta causa "se tendrían que levantar los ciudadanos, pero estamos dormidos".
Del mismo modo, ha asegurado que si esta prohibición la hubiera tomado el PP "hubiera sido la medida más antidemocrática y hubieran salido a la calle". El alcalde ha señalado que el PSOE "engaña a la gente", recordando que el portavoz del grupo socialista en el Parlamento andaluz, Mario Jiménez, "ha dicho que se cobran dos sueldos", algo que, a su juicio, es "mentira y además ilegal. Es imposible, pero lo dice y se queda dicho y la gente se lo cree en estos momentos de austeridad".
Por ello, ha insistido en que "quién puñetas es Griñán para prohibir esto", a la par que se ha preguntado que por qué no aplica esta medida el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, a nivel nacional. "Es una medida antidemocrática y por qué ahora y no antes. Por más que lo pienso, más cabreado me pongo", ha concluido.

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