Al San Fernando CD le ha mirado un tuerto. Es evidente que a mediados de octubre aún faltan muchos aspectos por trabajar en lo que a idea de juego se refiere. Pero, también es obvio que, si esas facetas se adquiriesen sumando, todo sería mucho más fácil. En Linarejos se achacó a un mal segundo tiempo, frente al Granada se aplaudió al rival, y hoy... resulta complicado establecer un culpable concreto cuándo viajas con siete bajas a un terreno de juego “especial”. Si encima a eso le sumas un par de errores individuales decisivos (uno en cada área), el resultado es una nueva derrota.
El conjunto isleño saltó al césped artificial de La Unión con lo justo, eso sí, con la novedad de Vidal en detrimento de Yerai en mediocampo. Toque de atención para el canterano, que no está al mismo nivel que hace varias semanas. Y el partido transcurrió tal y como se imaginaba.
La Unión, un conjunto incómodo, y más adaptado a la superficie, ganaba los duelos y llevaba el peligro al área isleña a través de sus extremos Karim y Alvarito. Fue el primero de ellos, el que dispuso de la ocasión más clara durante el primer acto (7´). Solo De La Calzada (un día más) salvó a la defensa isleña de su clásica empanada general.
Es cierto que, con el paso de los minutos, los de Iriondo se fueron soltando algo más a través de un Macías que cuajó unos buenas acciones en su demarcación natural. Sin embargo, las ocasiones no llegaron y el descanso apareció para frenar un primer tiempo en el que el fútbol fue escaso por parte de ambos.
Segunda mitad
Tras el paso por vestuarios, Iriondo trató de cambiar el devenir del encuentro y retiró a un Airam desaparecido, para hacer debutar a Álvaro Sánchez (interior en el Juvenil A) de lateral diestro, pasando Carrasco al extremo. Y es verdad que, a pesar de que apenas inquietó la meta unionense, el San Fernando vivió más en campo contrario.
El partido estaba para quién cometiera un error y los de Iriondo realizaron dos imperdonables. Tras una mano en el área local, Arnedo lanzaba un penalti blandito y para nada esquinado, que Salcedo sacaba para motivar a los suyos (71´). Y para más inri, poco después (78´), Pedrosa, sí que aprovechaba su turno desde los once metros tras la infracción de De La Calzada, provocada eso sí, por una cesión mortal de Germán.
El San Fernando estaba muerto y ni la entrada de Enri o Yerai sirvió para salvar al menos un punto. Todo sale al revés, y lo que parecía una “minicrisis”, cada vez va a más, y en la fiel afición isleña, comienzan a surgir dudas sobre el proyecto construido alrededor de Antonio Iriondo. Ocho de veintiún puntos, creo que las justifican en un arranque decepcionante.