El Ayuntamiento ha sacado a licitación el contrato para la compra de la Carrera Oficial de la Semana Santa de San Fernando por un importe de 1,279.782,65 euros. Según recoge la plataforma de contratación del estado, las empresas tienen de plazo hasta el 28 de octubre para presentar las ofertas, mientras que la Mesa de Contratación se reunirá el día 30 de ese mismo mes abrir el sobre de las entidades que han concurrido.
Según recoge el pliego de prescripciones técnicas, el objeto del contrato "es fijar las condiciones que regirán en la licitación para el suministro en régimen de compra de la estructura tubular y plataformas necesarias de las tribunas de la Carrera Oficial de la Semana Santa isleña, así como tres pequeños escenarios para la prensa y las cámaras de televisión. El plazo máximo de entrega de los bienes objeto de suministro será de dos meses.
El pasado mes de julio, el Gobierno local anunciaba su intención de adquirir las estructuras de la nueva Carrera Oficial, empleando la subvención de 890.000 euros obtenida de la Diputación (Plan Cádiz en Marcha) que estaría específicamente diseñada y pensada para San Fernando. De esta forma, el Ayuntamiento "ahorraría alrededor de 300.000 euros anuales del presupuesto, y, al mismo tiempo, se ganará en accesibilidad, seguridad, funcionalidad y estética, aportando mayor valor añadido e identidad a la Semana Santa isleña".
Como explicaba entonces el Ejecutivo municipal, esta prestación de la Administración provincial se destinará a la compra de toda la estructura de herrajes y de toda la gradería de la carrera oficial tanto en la calle Real como en la plaza del Rey y el atrio del Ayuntamiento. Su coste total asciende a 1.178.000 euros, con lo que el Ayuntamiento tendría que aportar 288.000 euros para su adquisición completa.
Hasta el pasado año el Consistorio isleño venía invirtiendo unos 300.000 euros anuales del presupuesto para el alquiler y montaje de las estructuras de la carrera oficial. Una cuantía que, tras la adquisición, podrá destinarse a otras actuaciones. De hecho, como consta en el propio pliego del contrato, al tratarse de un evento "tradicional-anual" es posible amortizar esta inversión "en pocos años" frente a los costes que supone el arrendamiento del sistema a terceras empresas. Se trata, además, de un material duradero con una vida útil superior a los 20 años.
