El Ayuntamiento de San Fernando ha puesto en marcha una línea de subvenciones para ayudar a las personas mayores de 65 años que, a día de hoy, tienen que seguir haciendo frente o bien al pago de una hipoteca, o bien al alquiler de una vivienda.

Se trata, sin lugar a dudas, de una innovación dentro de una administración pública desde el punto de vista de lo social. El contenido de dicha iniciativa lo ha dado a conocer este jueves alcaldesa isleña, Patricia Cavada.

En este sentido, se analizará cada caso particular para llegar al máximo posible en cada uno de ellos, al objeto de que a nivel fiscal no se vean afectadas por el hecho de recibir una pensión y dicha ayuda por parte de la administración local isleña.

Los beneficiarios podrán recibir hasta un máximo de 3.000 euros anuales para hacer frente al pago de esa hipoteca o alquiler de la vivienda, siendo los requisitos a cumplir: ser de San Fernando; pensionista; mayor de 65 años; tener que hacer frente al pago de una hipoteca o el alquiler de la vivienda. Todo aquel que está interesado puede acudir a las oficinas de Servicios Sociales, situadas en la zona alta del Mercado Central, para informarse.
La propia Cavada, a modo de ejemplo, explicó como funcionarán estar ayudas. Así, si una persona está pagando 300 euros o más por su vivienda -ya sea o bien de hipoteca o dealquiler- y gana 600 euros o menos al mes de pensión será beneficiaria directamente de esos tres 3.000 euros. En el caso de que esa pensión sea de 800 euros, la cuantía que percibirá será de 2.800 euros al año.
La fórmula básica para cálculo de lo que se percibirá se basa en el 75 por ciento de lo que se paga de alquiler o hipoteca se le reduce a lo que se tiene de ingresos efectivos al mes y, si es menos de 600, se entra dentro de esa ayuda de los 3.000 euros.
La alcaldesa ha hecho hincapié en que los límites varían en función de las circunstancias de cada persona, es decir, si se trata de alguien con alguna minusvalía, si se tiene hijos a cargo, si se vive con algún familiar, etc…