Desde el comienzo integran en sus clases la iniciativa propuesta por Hidralia y su fundación Aquae, en colaboración con el Ayuntamiento, para reducir en un futuro la brecha que existe entre hombres y mujeres a la hora de optar por carreras de ciencia.
Cada 11 de febrero, fecha en la que se celebra el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia se pone sobre la mesa los estudios e informes que alertan de la actual brecha que existe entre hombres y mujeres que cursan materias científicas y, lo que es más preocupante, de la falta de interés existente en jóvenes y niñas por este tipo de carreras. Todo ello cuando se tratan de profesiones y perfiles que cada vez son más demandados por las empresas.
Por eso, en 2019 se puso en marcha Aquae STEM, un programa educativo desarrollado por Hidralia y su fundación Aquae, en colaboración con el Ayuntamiento de San Fernando, que pretende atraer, potenciar y despertar estas vocaciones entre las alumnas de primaria, al mismo tiempo que busca sensibilizar a su entorno más próximo; entre los que se encuentran el profesorado, sus compañeros de clase y, por supuesto, su familia sobre la situación de la mujer en la ciencia.
Los dos centros
Desde el comienzo dos centros de San Fernando, el Vicente Tofiño y la Ecoescuela San Ignacio, han apostado por esta iniciativa. No solo eso, sino que han ido ampliando su desarrollo por cursos ante la buena aceptación de las alumnas y los logros obtenidos.
Un programa que se ha afianzado en el currículo escolar de ambos centros, pues ya cumple 5 años y ahora mismo llega a más de 110 escolares, entre cuarto y sexto de primaria, de ambos centros.
A lo largo de estos años el programa ha ido avanzando y ahora apuesta más por la digitalización, ofreciendo retos que se deben resolver de manera híbrida mediante la construcción de modelos físicos, pero también respondiendo desde una plataforma digital de aprendizaje.
Además cuentan con webinars y sesiones con referentes para ella, para que puedan visibilizar la acción de la mujer en la ciencia.Además, se ha incorporado como hilo conductor de todo el programa una referencia clara y uniforme, y que impacta de lleno a las jóvenes generaciones: la emergencia climática que está viviendo el planeta.
Esta línea de actuación en torno al agua y el cambio climático incrementa los beneficios que se obtienen con este programa de forma exponencial. Ya que, al impulso de las vocaciones científicas entre las niñas que se venía realizando desde 2019, se le une ahora un punto de vista analítico que dota de herramientas y nuevos saberes a estos jóvenes, para que puedan planificar un planeta más justo, verde y sostenible.
