Entre los vítores de familiares y amigos, y las caras de orgullo de numerosos padres y madres, más de un millar de alumnos del Centro de Formación de Tropa nº2 (CEFOT-2) juraron bandera y se convirtieron en soldados del Ejército Español este sábado en el acuartelamiento de Camposoto en San Fernando. El acto fue presidido por el teniente general Antonio Jesús Cabrerizo Calatrava, jefe de Mando de Personal, quien pasó revista a las tropas después de recibir honores de ordenanza.
Alrededor de las 12:30 horas, los 1.040 militares, de los 1.142 que iniciaron la formación en noviembre durante el segundo ciclo de la convocatoria 2023, superaron la primera fase general. Entre ellos, 947 hombres y 123 mujeres de las tres compañías de aspirantes a militar profesional de tropa, la escuadra de gastadores del cuartel y la unidad de música del Cuartel General de la Fuerza Terrestre de Sevilla formaron filas antes de jurar y prometer la defensa de España incluso a costa de la muerte.
No hubo teléfono móvil en el público que no intentara inmortalizar el momento del beso a la bandera nacional. Se colocaron tres enseñas nacionales, compuestas por las banderas del Regimiento de Infantería 'Napoles' Nº4 de Paracaidistas, del CEFOT-2 y el estandarte del Regimiento de Artillería de Costa nº4.
El coronel director del centro, Pablo Delgado de Luque, tomó juramento a los nuevos soldados y les dirigió unas emotivas palabras, además de felicitarlos, tanto a ellos como a las familias presentes, a las que catalogó como "copartícipes" de este logro.
De hecho, Delgado entregó un ramo de flores a una madre de un alumno, en representación de todas las madres de los jurandos. También le otorgó un diploma acreditativo por su profesionalidad y buena conducta al alumno Gonzalo Calandra García, miembro de la segunda compañía, como número 1 de la promoción.
La ceremonia se cerró con el tradicional homenaje a los soldados que dieron su vida por España. El broche final fue el pronunciamiento del Decálogo del Soldado por todos los nuevos militares, quienes se retiraron desfilando frente a la autoridad civil y militar entre gritos de orgullo.