La organización Euro-Toques ha alzado la voz para pedir medidas que frenen la extinción de la anguila.
Cabe recordar que
Euro-Toques es una organización internacional de cocineros que integra a más de 3.500 cocineros de 18 países. La fundaron Pierre Romeyer, Paul Bocuse, Juan Mari Arzak y Pedro Subijana, entre otros ilustres cocineros, el 18 de noviembre de 1986 en Bruselas. En España, la asociación está presidida por Andoni Luis Aduriz y cuenta con casi 800 cocineros,
con delegados autonómicos y provinciales, siendo en Cádiz el isleño Miguel Ángel López.
La anguila europea, un pez antes abundante en Europa y el Norte de África, y pieza clave de sus ecosistemas acuáticos, se encuentra en una situación crítica.
El reclutamiento de anguila, el número de angulas que llegan a las costas,
ha caído por debajo del 90 por ciento del anterior a los años 80.
La anguila europea está clasificada como en “peligro crítico”, paso previo a la extinción: está más amenazada que el águila imperial ibérica, el lince ibérico, el panda gigante o el gorila de montaña, especies cuyo pobre estado de conservación es mucho más conocido.
Desde 2007 existe una regulación europea que obliga a los estados miembros a tomar medidas para la recuperación de la anguila, pero
no se observan signos de recuperación.
Los científicos y científicas del Consejo Internacional para la Exploración del Mar (ICES) llevan desde el año 2000 aconsejando evitar todas las capturas de anguila, y se hallegado al 2023 con una rotunda recomendación, veda total, cero capturas. Además, piden que se tomen medidas para evitar otras mortalidades antrópicas y mejorar su hábitat.
Es fundamental que se siga el consejo científico, se cese la pesquería y se incluya la anguila europea en el
Catálogo Español de Especies Amenazadas.
Mientras la abundancia de anguila disminuía su precio aumentaba y la anguila se ha convertido en un producto de lujo, lo que ha fomentado su pesca y comercio ilegal.
Es por ello que entienden que “los cocineros y cocineras debemos comprometernos a no utilizar en nuestros restaurantes especies y productos amenazados con desaparecer. Y debemos pedir a nuestras administraciones tanto europeas como estatales que tomen medidas al respecto”.