De los usuarios de un gimnasio de Jaén capital, que se han acabado convirtiendo en un grupo de amigos, ha nacido un club de ‘adictos’ al running que cada vez cuenta con más miembros. Jaime Passolas, uno de los trabajadores del centro Entrénate, ubicado en la avenida de Madrid, es quien se encargó hace dos años de incorporar a la cartera de servicios del centro clases para correr, tanto de técnica como preparación para la competición en carreras.
Poco a poco se fueron sumando adeptos a esta disciplina y hoy en día son más de 40 participantes, lo que les ha llevado a tener que buscar nuevos escenarios para poder llevar a cabo sus entrenamientos y también dar una nueva dimensión a un proyecto que esperan que siga creciendo.
De hecho ya están tramitando los documentos necesarios para que oficialmente el Club Running Entrénate se constituya como entidad, aunque asegura Passolas que va a seguir con su mismo objetivo.
“Somos un gimnasio pero ahora también un club de running. Antes los teníamos abierto sólo para los usuarios de nuestro centro pero ya está abierto para el público en general. De hecho animamos a que la gente se anime y pruebe a entrenar un día con nosotros”, explica Jaime Passolas sobre un proyecto que desde que se inició no ha dejado de crecer.
Ya tienen equipaciones y ha habido varias marcas que se han interesado por su idea de club y que les están brindando apoyo en forma de patrocinio para material e inscripciones en las competiciones en las que poco a poco se están dejando ver. Además de Passolas también está al frente de este proyecto Antonio Foche, uno de los propietarios y a la vez trabajadores del gimnasio.
Tanto él como su compañero tienen claro que la finalidad del club no puede ser otra que la de mejorar la condición física de las personas que se apunten y, el más importante, que esto se consiga ligado a la diversión.
“Somos un club que parte desde la iniciación. Con nosotros se puede aprender a correr y esta es una de las principales bases del club. Contamos con usuarios que apenas se han puesto nunca unas zapatillas y con otros que tienen un nivel muy bonico. Tenemos de todo y todo el mundo tiene cabida”, aclara Passolas.
De hecho especifica que los entrenamientos se adaptan en función del nivel de las personas que acuden a cada uno de ellos. Los entrenamientos los realizan dos días a la semana y, aunque empezaron llevándolos a cabo en la pista de atletismo de La Salobreja, ya son demasiados para entrenar allí, por lo que están utilizando el Recinto Ferial Alcalde Alfonso Sánchez Herrar o el Camino Rural Vía Verde del Aceite. Y es que la capital del Santo Reino ofrece entornos especiales para los amantes de este deporte.
“Hacemos mini grupitos para que todo el mundo vaya acompañado, porque siempre podemos ir todos juntos. Además el 80 por ciento de las personas que están con nosotros es porque solos no se atreverían. Si vas con gente, al final te comprometes y sales a entrenar aunque no te apetezca mucho”, añade uno de los entrenadores.
Explica que en las competiciones se distribuyen de igual forma y es que hay a quienes les basta con acabarlas y otros que ya se están lanzando a largas distancias como la media maratón. Cada uno se marca sus propios retos aunque reconocen que participar en la San Antón es la meta estrella. “Muchos de ellos no la habían corrido nunca hasta que han estado con nosotros y hay muchos que sólo entrar para prepararse esa carrera, aunque después se acaban quedando”, apostilla Passolas, que también dibuja por dónde pasa el futuro del club: el Circuito de Carreras Populares de Jaén.