Telefónica España ha anunciado un plan de reestructuración que comenzará con el cierre de 13 de sus centros de trabajo, afectando inicialmente a 17 empleados. Este proceso es el inicio de un proyecto más extenso que contempla la afectación de un total de 266 empleados distribuidos en 108 localidades, centrándose principalmente en el área de Operaciones y Red.

En esta primera fase, San Fernando, junto con El Ejido en Almería, y varias en Santa Cruz de Tenerife, Girona, Tarragona, Alicante, Valencia, Madrid y Navarra, se encuentra entre las localidades afectadas. La medida implica el traslado de los empleados de estos centros a instalaciones en las capitales de provincia,centralizando así las operaciones.

Fuentes sindicales han indicado que la decisión de reestructuración está motivada por cambios tecnológicos y la búsqueda de una mayor cohesión en los equipos de trabajo. Sin embargo, ha generado controversia, encontrando oposición por parte de sindicatos como CC OO y UGT, quienes se oponen a las movilidades forzosas.

En un contexto paralelo, Telefónica está en plenas negociaciones con los sindicatos UGT, CC OO y Sumados para establecer un nuevo convenio colectivo (CEV). Este convenio incluirá un plan de salidas voluntarias, que se especula podría ser un incentivo para que más empleados opten por esta alternativa.

UGT, en un comunicado, ha subrayado el interés de Telefónica en ajustar el excedente funcional de los puestos de trabajo, adaptando la plantilla a las necesidades actuales del mercado y la empresa. Sin embargo, hay rumores en el sector que sugieren la posibilidad de que la empresa opte por un expediente de regulación de empleo (ERE), una herramienta históricamente utilizada por la compañía antes de 2015 y considerada más beneficiosa desde el punto de vista fiscal para los trabajadores.

Los planes de bajas voluntarias podrían afectar hasta un máximo de 5.000 trabajadores, aunque estimaciones actuales sugieren que el número real de salidas podría situarse entre 2.500 y 3.000. Estas cifras reflejan la magnitud de los cambios que Telefónica está dispuesta a implementar para hacer frente a los desafíos actuales del mercado.

UGT ha enfatizado la importancia de establecer un marco laboral sólido para el periodo 2024-26, especialmente en un momento de incertidumbre y necesidad de adaptación ante la regulación del sector y la competencia del mercado español. Mientras tanto, el sindicato Sumados busca un convenio de larga duración que garantice estabilidad a la plantilla y permita superar las dificultades actuales del sector.