La Policía búlgara encontró este martes a 61 migrantes indocumentados, tres de ellos con síntomas de asfixia, encerrados en el furgón de un camión que entró en Bulgaria procedente de Turquía y que había sido abandonado.
Fuentes policiales informaron a Efe de que los inmigrantes declararon ser ciudadanos afganos y el vehículo fue localizado en la ciudad de Burgas, a unos 70 kilómetros de la frontera con Turquía.
La emisora Nova TV señaló que una de las ruedas del camión se rompió la pasada madrugada y que el conductor huyó dejando a los afganos encerrados en el vehículo.
Al abrir los agentes las puertas, comprobaron que uno de los ocupantes estaba en estado crítico debido a la falta de oxígeno en el habitáculo, y tuvo que ser trasladado a un hospital, y otros dos se habían desmayado. Según la Policía, los inmigrantes eran todos hombres de entre 20 y 40 años.
Se cree que el vehículo había entrado en territorio búlgaro el pasado fin de semana y se dirigía a Serbia o a Rumanía, siguiendo las rutas de tráfico de personas hacia Europa Occidental.
Las fuentes policiales indicaron a Efe que desde hace varias semanas se interceptan cada día a entre 60 y 200 personas que tratan de entrar ilegalmente en Bulgaria procedentes de Turquía.
Bulgaria ha levantado una valla a lo largo de 235 kilómetros de su frontera sur para tratar de contener la entrada de migrantes y refugiados.
El Ministerio Interior señala que en 2021 fueron detenidos 10.799 extranjeros por entrar en el país de forma ilegal, tres veces más que el año anterior.
Del total detenidos, el 40 % son afganos, el 32 % siriosa y el 7 % iraquíes.