Los tres senderistas que paseaban por la zona del Dolmen de la Corona en Totalán (Málaga) el pasado 13 de enero y que ayudaron a los padres de Julen después de que el pequeño de 2 años cayera en un pozo han declarado este miércoles como testigos ante la jueza instructora del caso.

Los senderistas, que no han hablado con la prensa, han llegado a la Ciudad de la Justicia de Málaga a las 10.18 horas para prestar minutos después ante la jueza declaración, que ha concluido poco antes del medodía.

Antes de la llegada de los senderistas al juzgado, la abogada de los padres de Julen, Antonia Barba, ha afirmado a los periodistas que la declaración de estos testigos es tan importante como todas las demás y que "cualquier cosa es importante para esclarecer los hechos".

Tras las declaraciones de estos testigos, Juan Martínez, abogado del dueño de la finca en la que se encontraba el pozo en el que murió el pequeño, ha explicado a los periodistas que la declaración "no ha sido ni corta ni larga" y que ha sido una diligencia "como cualquier otra".

La instructora del caso ha citado a una docena de testigos, entre ellos el próximo 12 de marzo al pocero y al operario que hizo la zanja posterior al sondeo en la finca.

El cuerpo sin vida de Julen fue encontrado la madrugada del pasado 26 de enero, tras trece días de búsqueda después de que cayera a un pozo de unos 25 centímetros de diámetro y más de 70 metros de profundidad.