Una treintena de ayuntamientos de la provincia de Málaga evalúan los destrozos, que se produjeron tras la gota fría de este fin de semana. Se ha visto afectada la red de carreteras, varias infraestructuras y se han ocasionado problemas en el suministro de agua potable en al menos cinco localidades.
El Consorcio de Compensación de Seguros ha estimado inicialmente unos daños por las inundaciones valorados en 30 millones de euros.
Los alcaldes de los municipios perjudicados por la tromba de agua se reunieron ayer con la Subdelegación del Gobierno, la Diputación de Málaga y la Junta de Andalucía para evaluar las incidencias y desperfectos con el objetivo de sustentar una posible declaración de zona catastrófica.
La subdelegada del Gobierno, María Gámez, ha afirmado que la prioridad es “posibilitar la normalidad de la vida en estos pueblos y después reconstruir, mejorar y ayudar económicamente también, que lo haremos cada uno desde nuestro ámbito”.
Elías Bendodo, presidente de la Diputación, ha indicado, que tras un primer cálculo de los daños en la red de carreteras, estos ascienden a cuatro millones de euros. A los que hay que añadir los sufridos por las depuradoras, el coste será asumido por la institución.
Por su parte, el delegado del Gobierno andaluz, José Luis Ruiz Espejo, ha recordado que está activado el nivel 2 del Plan de Emergencias por riesgo de inundaciones en la provincia. También, desde la Junta se ofrecerá a los ayuntamientos ayudas para gastos de emergencia y reparación de infraestructuras municipales, según ha señalado Espejo.
Restablecer la normalidad
Los servicios de emergencia coordinados por el 112 Andalucía no han descansado durante toda la madrugada de ayer para restablecer la normalidad en los municipios malagueños afectados. En Estepona, una de las zonas más perjudicadas por las lluvias, ya se puede transitar prácticamente por todo el pueblo. Las labores de limpieza continúan en localidades como en Campillos, Ronda, Manilva, Gaucín, Benajabón, Fajarán,entre otras.
