El partido naranja sigue apoyando a Bendodo como presidente provincial pese a reconocer que el pacto entre ambos no se cumple al completo
La serpiente de verano en la política local saltó hace unos días con la insinuación de los socialistas de que intentarían un pacto de gobierno para quitar al PP del Gobierno provincial. No sabemos si se trataba de un simple brindis al sol, de un intento por animar el aburrido panorama de los pactos provinciales o si realmente este partido albergaba esperanzas de lograr algo en positivo con el resto de fuerzas, sobre todo con Ciudadanos, que es el que sostiene a Elías Bendodo en la institución. Ayer el portavoz del partido naranja en la Diputación reconoció que no ha mantenido ningún encuentro con los socialistas, y que al menos durante un año no se plantea retirar su apoyo a los populares. Desconocemos qué intereses le mueven para seguir apoyando a un gobierno en minoría que no ha cumplido con los compromisos que se marcaron ambos en el acuerdo de investidura. Porque Sichar dejó claro que al inicio del mandato sí se cumplieron, y que luego ese acuerdo ha perdido fuelle. En el camino, Bendodo le ha colado varios tantos por la escuadra a su socio, sobre todo en lo que respecta a los nombramientos a dedo dentro de la institución. La “brecha” que separa a unos y otros, en palabras del portavoz del partido naranja, no parece ser obstáculo para seguir renovando sus votos, aunque dejó la puerta abierta a un cambio de socio en unos meses. Habrá que ver cuánto tiempo le dura al dirigente popular este baile, y si aguantará hasta completar los cuatro años.