Animacómic desaparece. La que iba a ser la quinta edición del Salón de la Animación, el Manga y el Cómic no llegará a celebrarse. En una carta colgada en su página web, los organizadores del evento informan a los amantes del género, a los colaboradores y amigos la imposibilidad de llevar a cabo esta nueva edición, que tradicionalmente tenía lugar durante un fin de semana del mes de julio en el Palacio de Ferias y Congresos de Málaga.
Esta cita ineludible con los aficionados del manga y el cómic nació gracias a la empresa El Lapicero y por el anhelo de seguidores y profesionales de mostrar las múltiples novedades y facetas del mundo de la ilustración. Ahora, sus organizadores se han visto obligados a suspender Animacómic por la falta de recursos.
“Ha sido difícil pero finalmente hemos decidido no celebrar el próximo mes de julio la que iba a ser quinta edición de Animacómic. No nos es posible contar, por ahora, con los recursos necesarios para llevar a cabo el evento dentro de los estándares de calidad que venimos fijando desde la organización y continuar haciéndolo crecer. En el momento en el que se retome la celebración del salón nos volveremos a poner en contacto con vosotros y lo comunicaremos en nuestros medios oficiales”, reza la misiva.
Igualmente, el equipo de Animacómic apunta a sus seguidores que tampoco tiene contemplado colaborar en ninguna otra actividad o evento al margen del propio salón. “En caso de hacerlo igualmente sería anunciado en nuestros medios oficiales”, recoge la carta.
Animacómic se convirtió en estos cuatro años de vida en un referente incontestable en España. El evento reunía cada año a miles de fans en un encuentro lúdico y festivo que concitó a creadores tan destacados, como Salvador Larroca, Ana Oncina, Yami Tabby, José Luis Ágreda, Ender Wiggins, Andrés Palomino, Sergio Sánchez Morán o los integrantes de Twist Cómics.
Muy aclamada fue su exposición de la edición anterior sobre figuras de personajes de Star Wars, compuesta por enormes dioramas con escenas de la saga cinematográfica y juguetes originales producidos por la casa Kenner en 1978, además de dioramas de El señor de los anillos, dibujos de Wonder Woman, objetos y trajes steampunk, recreaciones de armaduras samuráis y kimonos japoneses y la recreación del desembarco de Normandía en miniatura. En definitiva, un encuentro con más de cien actividades y propuestas para todos los públicos en 2015 y que este año ha llegado lamentablemente a su fin.