La Sección Primera de la Audiencia de Málaga tiene previsto juzgar a partir del próximo miércoles a cinco policías locales del municipio malagueño de Mijas y a una persona más, acusados de formar una organización estructurada y, aprovechando la condición de agentes de la autoridad, presentarse en desembarcos de hachís, supuestamente apropiarse de la droga "y lucrarse" con la venta.
En concreto, la vista oral está señalada para los días 14, 15 y 16, según han confirmado a Europa Press fuentes judiciales. Los agentes fueron detenidos en noviembre de 2009 y el ministerio público sostiene que los cinco policías aprovechaban "su condición de funcionarios de la Policía Local de Mijas, la posibilidad de utilización de uniformes, armas, documentos y vehículos oficiales".
Inicialmente, el fiscal señala que usaban la información recibida "en su función de reprimir la delincuencia" y, supuestamente, se presentaban de forma sorpresiva y "sin ponerlo en conocimiento de sus superiores e intentando eludir todo control por parte de éstos" en operaciones de desembarco o tráfico de droga y provocaban la huida de los narcotraficantes, que abandonaban el alijo.
Así, "podían apropiarse y lucrarse con el producto de su venta", según el escrito provisional de la acusación pública. Se indica que en estructura, uno de los agentes imputado era "el jefe" y "lo era también de su pareja" de servicio, mientras que otro era "subordinado" al supuesto responsable, pero "manteniendo el control de su unidad operativa" y transmitiendo órdenes a su compañero.
La participación del quinto agente, según la calificación a la que tuvo acceso Europa Press, "radicaría, fundamentalmente, a partir de febrero de 2009, en el suministro de información decisiva para las operaciones, proveniente de importantes contactos que tiene tanto en otros cuerpos de seguridad como en el submundo del narcotráfico procedente de Marruecos".
OPERACIÓN
En cualquier caso, se apunta, su forma de actuar "les permitiría, y así también lo tenían planteado, simular que la habían incautado en cumplimento de sus funciones policiales". Tras algunas operaciones fallidas o que no se pueden acreditar, en noviembre de 2009 se habría llevado a cabo una, según sostiene el fiscal, para cuya organización tres de los acusados habrían quedado en casa de uno de ellos.
Una de las patrullas fue la primera en llegar a un descampado, en la zona de El Higuerón de Fuengirola (Málaga), en el que localizaron "una cantidad indeterminada de hachís, distribuida en pastillas de 250 gramos, custodiada por un niño que huyó al verles". Después llegaron los otros y contactaron con el sexto acusado, quien "a cambio de recompensa accedió a esconder dicha droga en su domicilio".
Allí, los investigadores intervinieron, según el atestado, 642 pastillas de 250 gramos, con un peso total de 162 kilogramos; mientras que el principal acusado "también escondió en su vehículo particular" otras cinco pastillas. Éste y su compañero fueron por tercera vez al descampado a recoger otras 50 pastillas, que iban a llevar al mismo domicilio, aunque fueron detenidos, señala el fiscal.
Se les acusa de un delito contra la salud pública en la modalidad que no causan grave daño y las penas solicitadas para los seis acusados contra los que se ha abierto juicio oral van entre los seis años y nueve meses de prisión para el principal procesado considerado el responsable del grupo, y los cuatro años de cárcel para el acusado que no es agente.