El sábado finaliza el Xerez Club Deportivo su nefasta andadura por la Tercera División y, salvo sorpresa no esperada, el domingo cerrará sus puertas la secretaría ya que, de momento, no hay nada que hacer. Y es más, lo lógico es que los dos únicos empleados que siguen trabajando, que no cobrando, para el Xerez extingan sus contratos en las próximas fechas. El miércoles, día 8, hay previsto un acto de conciliación con Francisco Barea López, que ha presentado la correspondiente demanda de reclamación de cantidades. Lo lógico, tal y como ha sucedido a lo largo de la temporada, es que el Xerez no se persone en el acto, por lo que se tramitará la extinción de compromiso del citado trabajo, que tendría que percibir la correspondiente indemnización.
Y si el día 8 está previsto el acto de conciliación con Barea López, para el día 20 está previsto con Manuel Gil que, igualmente, ha presentado la demanda de reclamación de cantidades. Si sucede lo que se preve, Gil también dejará de pertenecer a la disciplina laboral del Xerez, con lo que el club se quedará ya sin ningún miembro en la plantilla y,a partir de ahí, si decide seguir compitiendo tendrá que buscar colaboradores que trabajen a coste cero para el club.
De momento, la plantilla entrenará el miércoles, el jueves tiene previsto jugar un partido amistoso con un equipo inglés que se encuentra de concentración por esta zona y el sábado, tal y como anticipábamos en nuestra pasada edición, se jugará el último encuentro liguero ante el filial del Cádiz. Y punto y final.
A partir de ese momento se tendrán que mover las piezas. No parece que los acontecimientos se vayan a producir de hoy para mañana. Habrá que madurar y darle tiempo al tiempo. La Gestora comienza a moverse buscando posibles patrocinios y colaboraciones económicas de cara a la próxima campaña. Incluso se están elaborando opciones de cara al cuerpo técnico -si sigue la Gestora colaborando parece claro que no va a continuar Paco Higuera- y hasta se esboza un proyecto de cantera. Lo que ocurre es que tampoco puede moverse en demasía ya que está, de una parte, a expensas de lo que el accionista mayoritario decida hacer con la sociedad anónima deportiva y, de otra, la resolución definitiva de la Real Federación Española de Fútbol en torno a la repesca para Segunda B o mantener la postura inicial del descenso administrativo.
Parece que va a llegar un tiempo en el que la calma se va a imponer en el tema informativo respecto al Xerez Club Deportivo, a no ser que se precipiten los acontecimientos ya que Ricardo no descarta la petición de liquidación de la sociedad. Y es que una cosa son los sentimientos y las ilusiones de la Gestora y otra muy distinta la forma de pensar de Ricardo que, en principio, también parece apostar por seguir en la competición, aunque lo que hoy es blanco mañana puede ser negro.
