El tiempo en: San Fernando

Jerez

Agustín Castilla-Ávila mezcla fantasía y realidad en su ópera ‘cervantina’

El músico jerezano presenta ‘La Dulcinea de Don Quijote’, obra que dirige en formato de cámara

Publicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad Ai Publicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai Publicidad Ai

“Estoy encantado de que mi trabajo pueda verse en mi ciudad natal”, asegura Agustín Castilla-Ávila, músico afincado en Salzburgo, que presenta en el Teatro Villamarta mañana viernes día 1 de febrero ‘La Dulcinea de Don Quijote’, una ópera de cámara que, además de componer, dirige escénicamente. “La obra puede considerarse un ensayo sobre la fantasía y la realidad”, señala a la hora de definir este trabajo.
Esa interpretación de que “la fantasía es una realidad” parte de la propia obra cervantina y Castilla-Ávila la traslada al escenario. La ópera parte de una colección de cartas y reflexiones sobre esta temática, donde también se incluye el amor. Don Quijote, Sancho, Dulcinea, el caballero de la luna de plata, etc. se presentan como personajes que van narrando las misivas cursadas entre ellos sobre sus propias vicisitudes. “Las primeras palabras de la obra de Cervantes que todos conocemos se parecen mucho al encabezamiento de una carta. Es por eso por lo que voy presentando la mayoría de las escenas en forma de cartas”, explica Castilla-Ávila.
A su juicio, la célebre obra de Cervantes –que esta ópera de cámara toma como referencia- es “la más profunda que he conocido hasta ahora”. Y su intención no ha sido una mera traslación de las aventuras y desventuras del famoso hidalgo, sino ir más allá. “Si Don Quijote ve la realidad distorsionada es debido al espejismo provocado por el amor. El amor no es ciego como siempre se ha dicho. Enamorado sólo se ven las cosas de otra manera”, explica.
Sobre el escenario, ‘La Dulcinea de Don Quijote’ contará con los cantantes Katharina Schwardz (soprano), Bernd Lambauer (soprano) y Dmitri Ribero (barítono). La Orquesta Zahir Ensemble está formada por cinco músicos, bajo la dirección de Juan García Rodríguez. “Es muy agradable trabajar con gente tan fantástica”, dice sobre el equipo artístico.
Agustín Castilla-Ávila confiesa que siente “una gran responsabilidad al presentar mi trabajo en mi tierra por primera vez” y que estará más pendiente, si cabe, de la reacción del público, puesto que “me siento muy ligado a mi ciudad”.
‘La Dulcinea de Don Quijote’, un encargo del Festival de Passau en Alemania, ya ha podido verse en este país y en Rusia. Entre sus nuevos proyectos, el músico jerezano anuncia una nueva ópera de cámara (‘The Rest is Silence’), que se estrenará en mayo en Salzburgo.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN