Para aprender a conocer nuestras cosas es necesario que la conozcamos. Este fin de semana pasado he participado en una visita especial guiada por el Enclave Arqueológico de Carteia para ver las nuevas excavaciones realizadas. La verdad es que cada vez que voy me sorprende más y , lo curioso, es que es absolutamente distinto de Baelo Claudia pero también es espectacular.

Baelo tiene la catalogación de conjunto arqueológico, la máxima catalogación, además de encontrarse dentro del Parque natural del Estrecho y, a su vez, dentro de la Reserva Intercontinental de la Biosfera Andalucía-Marruecos.
Carteia tiene la catalogación de enclave arqueológico, sólo un escalón inferior a Baelo.

Está rodeada de chimeneas de la Refinería y empresas afines.

Pero, precisamente, por eso resulta absolutamente espectacular encontrarte esta maravilla allí en el medio de tanta industria. Es la otra joya arqueológica de nuestro Campo de Gibraltar.

Tiene , además, una excelente guía que te explica de manera magistral todo el recorrido que es muy intenso.

Dispone de una Muralla Púnica de entrada a la ciudad, un templo asentado sobre un altar de época púnica, un edificio termal con un repertorio completo de piscinas. Se conserva, igualmente, una vivienda romana con numerosas habitaciones , atrio con aljibe y, junto a ella, se conservan tramos del viario romano.
Cuenta también Carteia con la Torre del Rocadillo perteneciente al siglo XVI.

Factoría de salazones y, dentro de ella, un búnker de la Segunda Guerra Mundial.

Preciosa Escalinata monumental, edificios, necrópolis visigoda y el teatro que se encuentra parcialmente excavado y con capacidad para seis mil personas, además de la Calzada Romana que se encuentra en unas condiciones, yo diría, que excelentes.

El Centro de Interpretación de Carteia se encuentra en el Museo Municipal de San Roque inaugurado hace poco tiempo pero excelente en cuanto a la visita virtual que se puede hacer para reconocer la grandeza que tuvo en su día la ciudad romana de Carteia.

Es curioso , pero resulta que en la visita guiada que realicé, cuya reserva se hacía telefónicamente, éramos más de cien personas de las que la mayoría de ellas eran de Jerez. Los campogibraltareños éramos minoría lo que demuestra el poco conocimiento que tenemos de nuestras propias joyas.

Y es eso lo que queremos señalar, que es necesario que conozcamos nuestras propias cosas para poder, después, vender al exterior las excelencias de nuestra comarca.

Igual nos ocurre con Baelo Claudia por lo que pido desde aquí que vayamos a conocer nuestras joyas. Es gratuito y se pasaran una mañana cultural magnífica y reconfortante.

Todo esto constituye una auténtica MEDICINA PARA EL ALMA