En especial por las noches es imposible detectar por el color del pavimento que se trata de una zona acerada y máxime si la ocupan automóviles foráneos.
Es más, un paso de peatones que se supone parte de dicha zona carece por completo de pintura que lo identifique.
Un airado ciudadano algecireño colocó el pasado fin de semana dos carteles en los que se quejaba de la acción ejercida sobre su automóvil por parte de la Policía Local con multa de 300 euros y que textualmente decía:
“Aunque no está prohibido, no aparquen! Pues los incompetentes y chorizos gobernantes de este pueblo, junto a sus inquisidores ¡le estafarán! Firmado: uno más, de los ya ESTAFADOS. Valor de la estafa: 300 euros más rabieta”.