El primer fin de semana de la Feria de San Lucas desborda las previsiones y atrae a miles de visitantes de la provincia y otros puntos
Jaén ha vivido su primer fin de semana de Feria y Fiestas de San Lucas y lo ha hecho por todo lo alto, con el casco antiguo y San Ildefonso repletos de comensales y con el ferial abarrotado también, día y noche. Quiere esto decir que la feria de Jaén sigue atrayendo, a pesar de un presupuesto y una programación exigua, a miles de visitantes de toda la provincia y de otros puntos de la geografía andaluza, principalmente. Los hosteleros han visto de nuevo como en las terrazas no cabía un alfiler y los caseteros, pese a las críticas antes de comenzar la feria, se han mostrado satisfechos con este primer fin de semana en el que el tiempo ha dejado más calor de lo habitual, pero ha acompañado. En cualquier caso, aunque bien es cierto que la feria la hacen quienes acuden a ella, no estaría de más comenzar a atajar algunos problemas crónicos ya de este ferial. El primero es el del transporte, claramente insuficiente y muy lento, ya que al ser un servicio especial, se cobra uno a uno a los pasajeros, lo que hace que aparezcan interminables colas. El segundo, el aparcamiento, incapaz de acoger a tanto conductor empeñado en dejar el coche en la puerta de la caseta. Y por último, el fenómeno del botellón, que deja completamente asolado el recinto donde se ubica y donde es complicado encontrar contenedores para depositar la basura.