Vuelve el Carnaval de Jaén por sus fueros y este año la capital se quedará sin pasacalles porque solo tres agrupaciones se han inscrito en el Ayuntamiento antes de que expirara el plazo. Una de dos, o el mimetismo por la repercusión social que tiene en otras ciudades (y no hay que irse a Cádiz, porque tenemos muy cerca el ejemplo de Torredonjimeno) hace que se fuerce la máquina en esta ciudad, o definitivamente, el Carnaval no cuenta con el arraigo popular que tienen otras manifestaciones, ya sean laicas o religiosas, en la capital. No obstante, sí es cierto que al Ayuntamiento, con el equipo de gobierno del PP, no se le ve que digamos muy ilusionado con el Carnaval y la programación, más allá del concurso de agrupaciones, no invita a la jocosa cohabitación con Don Carnal. Parece que ha faltado información para que los jienenses y las propias agrupaciones se apuntasen al desfile, pero tampoco es que la Federación de Agrupaciones Carnavalescas hayan puesto el grito en el cielo para que no se suspenda el pasacalles. Es más, aseguran que la decisión ha sido consensuada, pero nadie ha dicho de ampliar unos días el plazo y hacer un llamamiento a los carnavaleros jienenses. No debería ser un problema el dinero que dicen que no pone el Consistorio, porque, como ocurre con las verbenas, en definitiva, es el pueblo el que da legitimidad festiva a una convocatoria. ¿Esto es Carnaval?