La nueva dirección de la Cámara de Comercio continúa luchando contra la quiebra de la entidad y a pesar de sus esfuerzos no termina de despegar. Eso, a pesar de que ya cuenta con la aprobación, desde hace quince días, del préstamo hipotecario de un millón y medio de euros concedido por la Caja Rural. Un préstamo que no se firma por el peligro de que los acreedores se “coman” ese dinero sin que llegue a los proveedores más urgentes que permitan la viabilidad de la Cámara.

Para ello, según ha explicado a VIVA JAÉN, su presidente Manuel Barrionuevo, están elaborando un Plan de Pagos. Del mismo se encarga, Antonio Ariza, la misma persona que realizó el Plan de Viabilidad aprobado este verano.

El objetivo es saldar primero cuentas con Hacienda y la Seguridad Social (unos 500.000 euros), lo que les permitirá recibir el dinero que les tienen retenido otras entidades camerales, y pagar a los trabajadores que llevan 15 meses sin cobrar. 

Según Barrionuevo se trata de “una ingeniería de pagos”  para poder coger el paso firme, de lo contrario de nada serviría tener un préstamo que no se va a poder devolver.

Los últimos meses han sido duros para la entidad que acumula una deuda de 5.800.000 euros. Además, se han perdido algunos proyectos, por plazos, y ahora los trabajadores “están haciendo lo humanamente posible para poder recuperarlos”, pidiendo “clemencia y benevolencia”  a los consejos camerales andaluz y nacional, para que no les retiren el dinero por los mismos.

Asimismo, Barrionuevo ha mostrado su satisfacción porque toda la “sociedad jienense” se ha volcado con la entidad, por lo que siguen intentando pagar “a todo el mundo”, porque lo “importante es que los empresarios tengan una Cámara limpia y trasparente”.

Por otro lado, hace una semana que ha comenzado la auditoría encargada por la anterior gestora para averiguar cuáles fueron las causas que llevaron a la Cámara de Comercio de Jaén a la actual situación de ruina. Según ha explicado Barrionuevo, aunque desconoce cuál es la empresa encargada, sí que les han abierto las puertas y facilitado toda la información necesaria, porque “no hay nada que ocultar”.