El hombre, identificado como S.M.T., al que el Ministerio Fiscal acusa de haberse apropiado de 47.570,43 euros procedentes del cobro de recibos y primas por parte de los clientes de la compañía de seguros en la que trabajaba, al no ingresar dichas sumas en la empresa, ha aceptado este miércoles devolver a la agencia esa cantidad de dinero, para lo cual se ha fijado un calendario de pagos que abarca los próximos años 2014 y 2015.
Así lo han pactado las partes en el juicio señalado para este miércoles en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Jaén, que, de esta manera, ha concluido con un acuerdo de conformidad, según han informado a Europa Press fuentes del caso.
En el caso de que el acusado no complete esa devolución fraccionada en el periodo de tiempo establecido para ello tendrá que cumplir una pena de dos años de prisión, solicitada por el Ministerio Público por un supuesto delito de apropiación indebida.
De esta manera, el encartado ha reconocido los hechos que le atribuía la Fiscalía en su escrito de calificación de los hechos, que relata que, a fecha de abril de 2010, el procesado tenía reconocida una deuda con la compañía aseguradora para la que trabajaba de un total de 42.232,12 euros por "los cobros de recibos y primas de seguros percibidas a consecuencia de la gestión de cobro que tenía encomendada de los respectivos asegurados y no liquidados a la aseguradora", así como por el "impago" de otras cuotas recogido en un reconocimiento de deuda anterior, fechado en noviembre de 2009.
Según la Fiscalía, el acusado, "con ánimo de ilícito beneficio", incorporó "a su patrimonio sin darle el destino pactado y sin reintegrarlo a sabiendas a la compañía" un total de 36.682,63 euros, derivados del cobro de mensualidades de 817,81 euros "hasta diciembre de 2010", y, además, "hasta febrero de 2011" percibió "el cobro de nuevas primas de los asegurados sin liquidarlas, disponiendo de ellas en beneficio suyo ilícito, por valor total de 10.887,8 euros".
De igual modo, "valiéndose de la clave informática (...) proporcionada por la mercantil", el acusado "formalizó, a sabiendas de su inveracidad, telemáticamente comunicaciones de diversos siniestros haciéndose constar una cuantía de percepción económica por valor de 935 y 135 euros respectivamente durante los meses de noviembre y diciembre de 2010 respecto de distintos asegurados de la compañía y que no habían en realidad ocurrido", si bien "no logró percibir importe alguno derivado de los mismos", ya que los asegurados pusieron de manifiesto lo ocurrido a la agencia.
Por estos hechos, la Fiscalía solicitaba para el procesado el pago de una indemnización de 47.570,43 euros a la compañía de seguros "en concepto del montante dinerario indebidamente percibido y no reintegrado", cantidad que será la que el encartado tendrá que devolver entre los próximos años 2014 y 2015, según lo acordado este miércoles con la empresa.