El Real Jaén no pudo superar la primera eliminatoria de la Fase de Ascenso a Segunda División, en su confrontación con el Deportivo Alavés, en un duelo de campeones que ha llevado al equipo vasco a la categoría de plata del fútbol español.


El resultado final de 1-0 para el equipo vitoriano fue injusto porque los de Herrero, aunque siguieron teniendo en el gol su asignatura pendiente, realizaron un gran encuentro, un fenomenal primer tiempo, mereciendo un mejor resultado.


Salió el equipo jienense convencido de que todavía, aunque acudía a Victoria con un resultado poco favorable, tenía mucho que decir en la eliminatoria. Y así planteó el partido el técnico iliturgitano, con una buena disposición de sus hombres en el campo, presionando arriba y el centro del campo para impedir la salida con el balón jugado de los alavesistas. Quizás el único lunar es que no se supo parar las acometidas por la derecha de Óscar Rubio y Guzmán, que desde que salió en la segunda parte en el partido de ‘La Victoria’, lo que propiciaba internadas hacia el área de Toni García.


Pero el Real Jaén estuvo muy metido en el partido, y sabiendo que en cualquier momento tendría su oportunidad y habría que aprovecharla.


Con el 0-0 en el marcador, las espadas seguían en todo lo alto, si bien el equipo jienense tenía que marcar. No tuvo opciones en la primera mitad, pero tampoco el Alavés, que daba la impresión que especulaba con el resultado, sabiendo que también sus ocasiones podrían llegar.
En la segunda mitad el juego estuvo más igualado si cabe, aunque poco a poco el equipo vasco iba tomando posiciones para crear problemas a Toni García. Sin embargo, se esperaba la reacción de los jienenses si se llegaba a la recta final del encuentro con el marcador inicial, que no le servía, y daría el ascenso al equipo albiazul.


Pero cuando faltaba un cuarto de hora para el final, el árbitro, el aragonés Herrero Arenas, que fue protagonista cuando amonestó en el primer tiempo a Gaitán, porque –dice- “entró sin mi permiso el  campo”, cuando no debería haberle indicado que saliera del mismo, cuando estaba siendo atendido en la banda, protagonizó una jugada indigna de un hombre que sale al campo a ‘impartir justicia’. Pitó un penalti que él solo vio –hasta el jugador vasco Juanma, se sorprendió de la pena máxima-, y su conciencia no estaría muy tranquila, cuando no mostró la tarjeta al ‘2’ jienense, que hubiera supuesto su expulsión. La pena máxima la ejecutó Viguera, batiendo a Toni García.
A partir de ese momento, los jienenses se fueron a por todas, dominando aún más el control del balón y acercándose con reiteración a los dominios de Iván Crespo. Si en el penalti al Real Jaén, Herrero Arenas no dudó ni un instante, cuando dos defensores vascos, poco después, hicieron un ‘bocadillo’ sobre Elady, a pesar de estar a dos metros de la jugada, cerró los ojos y dejó continuar el juego. En los últimos compases, los alavesistas, en un contragolpe, pudieron marcar el segundo tanto,  pero Toni García realizó una gran intervención ante Guzmán.


El Real Jaén cercó el área albiazul y hasta Toni García, que había subido al ataque, tuvo ocasión para disparar desde la frontal, pero la pelota la desvió a córner un defensor. Luego, el árbitro también hizo caso omiso a una falta cerca del área sobre Óscar Quesada, -qué gran partido realizó el de Orcera-, que hubiera supuesto una nueva ocasión para marcar.


Desilusión y lágrimas en una gran afición que acompañó a su equipo y vio con desesperación que las decisiones arbitrales impidieron al Real Jaén el dar el salto a la ansiada categoría de plata del fútbol español. Más de 700 aficionados acudieron a la cita en autobús, o vehículos particulares, demostrando que el Real Jaén no está solo en esta aventura del ascenso. Al final del partido, los jugadores jienenses, desolados, tumbados sobre el terreno de juego, se fueron, posteriormente, al lugar donde estaban los aficionados para compartir esos momentos tristes, mientras que sus rivales celebraban el ascenso.


En definitiva, se perdió la primera posibilidad de ascender a la ansiada Segunda División, pero habrá otra oportunidad. El Real Jaén nunca se rinde y lo va a demostrar a partir del próximo domingo en una nueva eliminatoria.

Sala de prensa
Manolo Herrero llegó indignado a la sala de prensa de ‘Mendizorroza’ y, tras analizar el partido, marcado por la imparcial actuación del colegiado aragonés Óscar Herrero Arenas, el técnico blanco refirió que “si hablara lo que pienso del árbitro, no entrenaría en mucho tiempo”.
Asimismo declaró que “si el Alavés hubiera necesitado más goles, los habría marcado”, para sentenciar que “somos un equipo humilde, pero también queremos ascender”. El presidente fue contundente en las redes sociales y dijo que “no voy a dejar que esto quede asi. No es mi estilo pero no se pueden reír de un equipo, de una ciudad y de una afición. Me van a oír”.


Los jugadores, por su parte,  estaban resignados por lo que había ocurrido. Gaitán apuntó que “es una gran impotencia lo que hay en nuestro cuerpo, porque ante estas cosas no podemos hacer nada, porque demuestras ser superior a un rival y que nos gane de la manera que lo han hecho, es intolerable”, y añadió que “no obstante esta situación nos va a hacer más fuertes para las próximas eliminatorias”. Elady, jugador al que le hicieron un penalti que no señaló el árbitro, refirió que “dos jugadores alaveses me han hecho ‘un sobre’ y al árbitro no ha querido saber nada a pesar de que me han quitado todas las opciones de rematar”, significando que “el árbitro sabía el peso de un equipo y otro, ellos eran los elegidos para pasar y así ha ocurrido”.


Óscar Quesada que realizó un gran encuentro dejó claro que “sentimos impotencia, la eliminatoria ha estado marcada por dos penaltis, y si el de Jaén fue claro, aquí cuando empezaban a ponerse nerviosos han contado con la ayuda arbitral, que luego no ha sido capaz de señalar un penalti claro a Elady”. Hemos luchado contra todo, pero no hemos podido lograr el objetivo, pero vamos a trabajar para lograrlo en la próxima oportunidad”.


Finalmente Diego Cascón afirmó que “el que haya visto la eliminatoria no dudará en lo que ha decantado que el Alavés esté en Segunda División”, para sentenciar que “las injusticias hay que castigarlas y cuando los futbolistas hacen trampas hay que sancionarlos, y en ese mismo contexto, espero que a este árbitro se le sancione”.