Huelva capital cuenta con dos comedores sociales abiertos durante todo el año y que, por tanto, mantienen su actividad en verano, los cuales atienden a unas 180 personas diarias.
De este modo, el comedor Virgen de la Cinta, ubicado en el barrio El Molino de la Vega, y el de la Iglesia Cristina Evangélica de Huelva (Renacer en Jesucristo), enclavado en el barrio del Matadero, son los dos comedores de carácter social que mantienen su actividad durante todo el verano.
Según han informado desde el comedor Virgen de la Cinta, éste atiende entre 120 y 150 personas al día, lo que supone una cifra similar a la que se da en invierno.
Cuestionados por si se produce un alza al haber menos recursos abiertos en verano, desde el comedor Virgen de la Cinta han explicado que muchas personas necesitadas se marchan a las zonas costeras ya que, además de ser más soportable el clima, ven más posibilidades a la hora de pedir en la calle, en muchos casos.
El comedor, creado hace unos 30 años por un grupo de mujeres, ofrece un primer turno de comida a las 14,30 horas y, si hay recursos, dispone un segundo para atender al mayor número de personas posibles. En ocasiones, además del almuerzo, les dan una botella de zumo o unas galletas para que puedan pasar la tarde hidratados y con algún alimento.
Con dos cocineras fijas y un guardia de seguridad, el comedor Virgen de la Cinta cuenta con voluntarios que hacen que cada día (de lunes a sábado) éste pueda dispensar el almuerzo. Han señalado que durante el verano debido a las vacaciones se reduce el número de voluntarios, por lo que es en esta época cuando precisan de más personas que quieran colaborar puesto que en el invierno los equipos de voluntarios están más consolidados. No obstante, han dejado claro que de lunes a sábado (incluidos festivos) abren sus puertas con el afán de ayudar.
En verano, fecha en que baja el número de voluntarios, también se dan situaciones de solidaridad que les sobrecogen ya que tres mujeres que pasan sus vacaciones en la provincia al conocer este proyecto comenzaron a colaborar con el comedor y ayudan en los turnos de comidas.
Por su parte, en el barrio del Matadero, en concreto en la calle Ciudadela, se encuentra el comedor que desde hace cerca de dos años puso en marcha la Iglesia Cristina Evangélica de Huelva (Renacer en Jesucristo). Su pastor, Luciano Gómez, ha explicado que unas 30 personas pasan cada día por el mismo que, salvo los domingos, se mantiene abierto todos los días. Ofrece desayuno y bocadillos a las personas que acuden, así como realizan reparto de alimentos, fundamentalmente fruta, verduras y pescado.
Ha precisado que el sábado prácticamente dan "un carro de la compra con legumbres, verduras, frutas y pescado". A lo largo de la semana, según ha explicado, unas 200 personas pasan por el servicio asistencial que ofrecen y que, en un primer momento nació para atender a personas de la iglesia pero que, ante la demanda, se ha abierto a todo el que lo necesite. "No se le niega la ayuda a nadie", ha dicho Gómez, que ha remarcado que también atienden a las personas 'sin techo' que viven en el poblado chabolista cercano al barrio a los que dan comida y bebida.