CSIF denuncia que sucedió durante la tarde del sábado, cuando el interno, con una larga trayectoria delictiva, regresaba a su módulo tras estar en aislamiento
El sindicato CSIF ha denunciado la agresión sufrida por cuatro funcionarios del Centro Penitenciario de La Ribera durante la tarde del sábado, cuando resultaron lesionados tras ser atacados por un interno con una larga trayectoria delictiva.
La agresión ha sido confirmada a EFE por Instituciones Penitenciarias, aunque por el momento no han podido aportar más detalles sobre la misma.
Desde el sindicato, por su parte, han precisado a través de un comunicado que los hechos ocurrieron cuando el interno regresó a su módulo residencial después de cumplir una sanción de aislamiento en celda.
El recluso, disconforme con algunas medidas adoptadas, comenzó a increpar a los funcionarios.
A pesar de los esfuerzos de los trabajadores por calmar la situación, el interno se mostró extremadamente agresivo, lanzó amenazas e insultos y agredió físicamente a los funcionarios con puñetazos, patadas y mordiscos, ha añadido CSIF.
Gracias a la presencia de una de las dos doctoras en activo, el interno pudo ser trasladado nuevamente al departamento de aislamiento.
Este procedimiento requiere un reconocimiento médico previo, sin el cual la medida no puede aplicarse.
Por este motivo, CSIF ha recalcado la importancia del personal sanitario en estos centros.
Los cuatro trabajadores recibieron atención inicial en las dependencias sanitarias del centro y posteriormente fueron trasladados al hospital para una evaluación más exhaustiva de sus lesiones.
CSIF ha reiterado que estas agresiones no son casos aislados y ha señalado que en 2023 el centro fue el cuarto en número de agresiones a nivel nacional.
Según el sindicato, una de las causas principales de estos incidentes es una incorrecta clasificación interna de los reclusos, con internos que deberían estar en primer grado, el más restrictivo, ubicados en módulos de segundo grado, lo que genera conflictos con funcionarios y otros presos.
La organización sindical también ha destacado la labor diaria de los trabajadores penitenciarios, que operan en condiciones cada vez más precarias.
En el área sanitaria del centro, solo dos de las nueve plazas de facultativos están cubiertas, una situación que se agrava durante el periodo vacacional. Aunque recientemente se ha contratado a un médico, esta medida es insuficiente.
Desde CSIF han deseado una pronta recuperación para los compañeros agredidos y exigen que los responsables de estos actos violentos sean castigados con la severidad que requieren.