El alcalde de Granada, Francisco Cuenca (PSOE), ha exigido a la Junta que paralice la liberalización de aperturas que implica la declaración de esta capital como Zona de Gran Afluencia Turística, una medida que rechaza el pequeño y mediano comercio y que temen genere pérdidas de empleo.
Cuenca ha hecho estas declaraciones acompañado del secretario general del PSOE-A, Juan Espadas, el presidente de la Diputación de Granada, José Entrena, y el presidente del Centro Comercial Abierto de Ganada, Ángel Rodríguez, entre otros, para pedir a la Junta "sensibilidad y respeto" al comercio de proximidad.
Según Cuenca, la implantación de la Zona de Afluencia Turística es un ataque a las miles de familias que luchan por mantener abiertos sus negocios, por lo que le ha pedido a la Junta que paralice la libertad de horarios y de apertura los días festivos durante todo el año.
Han pedido al presidente de la Junta, Juanma Moreno que rectifique y "atienda la voz unánime" del sector, ya que la liberalización de horario ha sido rechazadas por la Federación Provincial de Granada de Comercio, la Federación Granadina de Comercio y los propios sindicatos.
"Lo único que está haciendo Moreno es ponerse del lado de los grandes contenedores y superficies comerciales, que no de sus propios trabajadores, ya que como protestan sus sindicatos se les está atacando la conciliación familiar, con horarios insufribles", ha lamentado Cuenca, que ha reclamado una moratoria.
El Ayuntamiento ya presentó alegaciones a la medida y se opuso en pleno, y ahora ha reclamado un estudio que aborde las consecuencias y calcule el impacto en el comercio tradicional.
Por su parte, el presidente del Centro Comercial Abierto de Granada ha lamentado que la norma convierta "en una jungla" al comercio.
"Que nadie piense que la Zona de Gran Afluencia Turística va a generar empleo, muy al contrario, va a destruir empleo y va a acabar con los negocios y comercios de toda la vida, a la vez que va a precarizar el empleo existente", ha resumido.