Más de cien dotaciones de los Bombers de la Generalitat y de la Unidad Militar de Emergencias (UME) trabajan desde primera hora de la mañana contra el fuego desatado ayer en el municipio tarraconense de Santa Coloma de Queralt, que ya ha quemado 1.100 hectáreas de varios municipios y que ha obligado a desalojar a unas ochenta personas.
La difícil situación de este incendio, que arde sin control con un frente de 7,5 kilómetros y que es el más grande de este verano en Cataluña, sumada a la del fuego que afecta al municipio gerundense de Ventalló, han llevado a Protección Civil a activar la pasada noche en fase de alerta la Emergencia del plan especial Infocat.
Durante la noche han trabajado en la zona unos 270 efectivos de los Bombers de la Generalitat, a los que se han sumado a primera hora de la mañana miembros de la UME y doce medios aéreos.
El fuego, que afecta a los municipios de Bellprat, Les Piles y Santa Coloma de Queralt, ha levantado una columna de humo y fuego visible a 60 kilómetros de distancia y sus cenizas han llegado a algunos barrios de Barcelona.
Los responsables de los Bombers y el conseller de Interior, Joan Ignasi Elena, han informado esta mañana en el centro de mando habilitado en la zona de que el fuego arde sin control con un frente de más de 7,5 kilómetros, especialmente en su flanco izquierdo, y de que el viento ha complicado los trabajos.
La previsión es que durante el día de hoy el viento sople hacia el norte, en dirección al municipio de Tous, aunque con menos intensidad que en las últimas horas.
Por otro lado, los bomberos han logrado estabilizar el incendio que también desde ayer por la tarde arde en Ventalló (Girona), donde durante la noche han trabajado 30 unidades, y que ha arrasado medio centenar de hectáreas.
