El candidato de Vox a la Presidencia del Principado, Ignacio Blanco, ha recordado este domingo al sindicato UGT que el suyo es un partido "legal, democrático y reformista" y ha cargado contra el "cordón sanitario" que el sindicato ha dibujado frente a Vox.
En una nota de prensa, Blanco ha señalado que lo que "no le gusta" a la Unión General de Trabajadores es que van a "suprimir todos las subvenciones gracias a las que viven, unas subvenciones pagadas con el dinero de los trabajadores para mantener los privilegios de la casta sindical que ellos representan".
UGT, ha recordado, "está vinculada a los mayores casos de corrupción de la historia de España y de Asturias". Es por ello que Blanco ha mostrado su sorpresa por las declaraciones del "subvencionadísimo" sindicato, que dice que presentará sus propuestas sociales a todos los partidos menos a Vox "porque no reconocen la etapa democrática española".
"Quizás UGT debería hacer más auto crítica e inventarse menos enemigos monstruosos", ha explicado Blanco. En primer lugar, ha dicho, porque la función de un sindicato "debería ser la defensa laboral de sus afiliados y de los trabajadores, y no hacer sectarismo y repartir carnets de demócratas y anti-demócratas". Asimismo, porque "de sobre es conocida sus conexiones en el golpe de Estado contra la República en 1934 y contra el derecho al trabajo de quienes no secundan sus convocatorias de huelga, al ser hostigados por sus piquetes gansteriles, además de ser estar vinculada a los mayores casos de corrupción de la historia de España y de Asturias".
Vox, ha zanjado Blanco, es un partido "legal y constitucional, democrático y reformista, con programa y propuestas por una España más unida, más libre y más próspera". Todo ello, ha dicho, puede ser compartido o no, "pero de momento cuentan con el respaldo electoral de más del diez por ciento de los españoles".