El exsecretario general de la OTAN y exalto representante para la Política Exterior y la Seguridad Común de Europa ('Mr.Pesc'), Javier Solana, ha afirmado este martes que lo más efectivo para acabar con el Isis es una estrategia de "asfixia" económica, por encima de bombardear los territorios donde tiene implantación, principalmente Siria.

   En declaraciones a Europa Press tras inaugurar una jornada en Esade sobre tendencias globales y estrategias metropolitanas, ha dicho: "Cuesta trabajo entender cómo no nos metemos más seriamente en la financiación" del Isis.

   Solana ha interpretado que Francia apuesta por bombardear Siria tras los atentados del viernes en París porque "se ha sentido agredida desde el exterior y el interior" --algunos terroristas tenían pasaporte francés--, pero ha avisado de que esta medida no arreglará el problema.

EL PAPEL DE ESPAÑA

   Sobre si el Gobierno español debe apoyar la estrategia bélica de Francia, ha insistido en que "la solución no será militar", y ha animado a España a actuar con liderazgo, responsabilidad y en coordinación con el resto de países europeos y del Mediterráneo.

   "Con centrarse en el bombardeo militar a Isis no va encontrarse la solución, al menos por ahí solamente", y ha insistido en la necesidad de atacar las vías de financiación del Isis, que son principalmente las procedentes de la venta de petróleo.

INGRESOS DEL PETRÓLEO

   Ha criticado que "puedan verse en las carreteras que salen de Siria cadenas de cientos de camiones que exportan petróleo del territorio controlado por Isis", una mercancía que compran otros países y contribuyen así a financiar a los terroristas.

   "Si los camiones no salieran y nadie lo comprara, esto no ocurriría. Controlar este tipo de cosas es mucho más fácil, teóricamente, que otras cosas", como la intervención militar en la zona, ha añadido.

   Para Solana, lo mejor es "asfixiarlos por carencia económica, aunque luego haya personas e incluso algún país que puedan seguir financiando", algo que no puede compararse con las cantidades ingentes de dinero que ingresan con la venta de petróleo.

CHIÍTAS Y SUNITAS

   Esta estrategia serviría para menoscabar el poder del Isis, aunque Solana ha avisado de que el problema no se solucionará definitivamente hasta que se ponga "en contacto activo a dos grandes países: Irán y Arabia Saudita", como capitales de los chiítas y los sunitas, respectivamente.

   "Lo que estamos viendo hoy es todavía una gran batalla histórica entre chiítas y sunitas, que ahora tienen el territorio del conflicto en Siria, pero podría haber sido otro país donde hubiera una mezcla de chiítas y sunitas", ha manifestado, tras aseverar que la solución debe buscarse por los cauces políticos.

RUSIA, EEUU Y EUROPA

   Solana ha celebrado que la comunidad internacional llegara a un acuerdo con Irán para frenar la proliferación de armas nucleares: "El espacio que se abrió entonces era fundamental, y debió haberse aprovechado con una energía mucho mayor y con más dinamismo para seguir buscando conversaciones inteligentes entre ambos países".

   "Inmediatamente después de cerrar el acuerdo debieron volverse a sentar para mirar con panorámica más amplia y buscar acuerdos, no sólo en lo nuclear. Quedaba mucho por resolver, como vemos ahora", ha proseguido.

   Y ha concluido: "La tensión en Siria entre Rusia, Estados Unidos y Europa es fuerte, pero creo que es perfectamente soluble si nos ponemos a debatir en el mismo ambiente, con la misma energía y la misma tenacidad con que nos pusimos a negociar con Teherán el acuerdo nuclear".