El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha reclamado que al Estado español que abandone su "cerrazón y asuma la realidad nacional diferenciada" de Euskadi. Además, aunque ha insistido en la necesidad de "diálogo y acuerdo", ha reivindicado el derecho a que "todos los proyectos puedan ser defendidos y satisfechos en función de las mayorías".
Urkullu ha trasladado este mensaje durante el pleno de control que celebra este viernes el Parlamento vasco, en el que UPyD le ha preguntado sobre cuál es el modelo de Estado que defiende.
La respuesta del lehendakari al parlamentario de UPyD, Gorka Maneiro, se produce un día después de que la Cámara autonómica, con el apoyo de PNV y EH Bildu, haya aprobado una resolución que defiende el "derecho de autodeterminación de Euskal Herria".
El presidente del Gobierno autonómico ha afirmado que existe "una oportunidad que nunca hemos tenido", y que el Parlamento vasco --en el que está en marcha una ponencia para debatir sobre el estatus político de Euskadi-- es el foro en el que "los proyectos deben ser planteados, debatidos y decididos".
Urkullu ha reivindicado el derecho a que "todos los proyectos puedan ser defendidos y satisfechos en función de las mayorías que existan". En este sentido, ha pedido que se respete la posibilidad de "intentar buscar consensos" para lograr estos objetivos. "Diálogo, negociación, acuerdo y ratificación. Éste es el procedimiento que quiero seguir", ha manifestado.
"CERRAZÓN"
El lehendakari ha lamentado que, hasta la fecha, estos planteamientos tan sólo han encontrado como respuesta "la cerrazón". No obstante, ha advertido de que "algo ha cambiado". La diferencia, tal como ha indicado, radica en que se ha evidenciado que "el modelo actual no responde satisfactoriamente a las demandas y aspiraciones que se están planteando, elección tras elección, consulta tras consulta, encuesta tras encuesta, en Euskadi".
En su opinión, los resultados electorales de las elecciones europeas de este pasado domingo --que en Euskadi situaron al PNV y a EH Bildu como las fuerzas más votadas-- "es la enésima prueba de una realidad nacional diferenciada". "Esta realidad nacional se puede negar o se puede aceptar, y el nuevo modelo de Estado que propongo asume esta realidad; no la niega", ha afirmado.
Urkullu se ha mostrado partidario de "un nuevo modelo de relación entre Euskadi y el Estado". Dicho modelo, debería partir de "las potencialidades contempladas en la Disposición Adicional Primera de la Constitución --referida a los derechos históricos de los territorios vascos-- y en el Estatuto" de Gernika.
"MÁS SOBERANÍA"
A partir de ahí, ha propuesto avanzar hacia "un modelo de autogobierno más actualizado, más avanzado" y basado en una serie de principios. En primer lugar, se trataría de un modelo de "bilateralidad efectiva".
"Más soberanía, incluso compartida; voz propia en Europa; un desarrollo íntegro del autogobierno que incluya la imposibilidad de modificación unilateral del mismo; respeto de las decisiones democráticas adoptadas por el Parlamento y ratificación mediante una consulta legal y pactada", ha planteado, tras lo que ha recordado que estos principios se recogen en un documento del PNV de 2005 y en otros textos posteriores.
Urkullu ha propuesto un nuevo modelo de Estado que esté "abierto a un diálogo cuyo resultado no esté predeterminado" y que, "desde la lealtad mutua y la negociación de buena fe, pueda dar cauce a todas las aspiraciones políticas que se planteen de forma democrática".
Además, ha afirmado que la ponencia de autogobierno del Parlamento vasco debe convertirse en "un crisol de encuentro", y que la declaración aprobada este pasado jueves por la Cámara sobre la autodeterminación "no cierra nada, sino que abre". "Ahora tenemos la posibilidad de aprobar un nuevo marco desde el diálogo, negociación, acuerdo y ratificación", ha insistido.