El informe médico elaborado por los médicos que la examinaron el 14 de mayo indica que la mujer sufría diversas heridas causadas por una violación.
La empleada del hotel Sofitel de Nueva York que acusó de agresión sexual al ex director del Fondo Monetario Internacional Dominique Strauss-Kahn fue violada, según afirman los médicos que la trataron ese día y revela el semanario francés L'Express.
Médicos del hospital St. Luke's Roosevelt de Manhattan examinaron a Nafisatou Diallo el pasado 14 de mayo, el día de la supuesta agresión, y según el informe elaborado la mujer sufría diversas heridas causadas por una violación.
“Diagnóstico: agresión. Causa de las heridas: agresión. Violación”, indican las conclusiones del informe difundidas por L'Express, en las que se añade que Diallo llegó al centro en ambulancia, aunque era capaz de desplazarse por sí sola, y estaba junto a un agente de policía.
El informe recoge también la declaración del personal sanitario que la acompañaba, según el cual esa empleada de hotel se quejaba de haber sufrido una agresión sexual.
“Me ha empujado hacia abajo y me ha metido el pene en la boca”, les dijo la paciente, descripción que ella misma repitió a los médicos que la trataron en el centro.
Llorosa, Diallo dio a los médicos más detalles de esa agresión, que están contenidos en el informe.
“Un hombre desnudo con el pelo blanco cerró la puerta y la empujó encima de la cama” en un primer momento, para posteriormente agredirla al fondo del pasillo, donde tocó “la parte exterior de su zona vaginal” e “introdujo su pene en la boca agarrándola del pelo”.
La última página del informe médico describe la zona vaginal de la paciente, donde se señala la presencia de un traumatismo en la parte posterior, además de indicar que la zona estaba enrojecida.
El abogado de la demandante, Kenneth Thompson, expresa en una entrevista concedida también a “L'Express” su convicción de que su clienta sufrió una agresión sexual, y su sorpresa de que la Fiscalía, aunque tenía y abordó estos datos al principio de la investigación, no les haya concedido mayor peso.
Para el letrado, “no existe” la conversación filtrada a la prensa en la que presuntamente la mujer se comunicó con un amigo encarcelado por tráfico de marihuana y habló con él sobre los beneficios que podría traerle un juicio contra Strauss-Kahn.