La economía y el desempleo merman su prestigio a los niveles más bajos del mandato.
El presidente de EEUU, Barack Obama, busca recuperar la confianza de sus votantes con una gira que iniciaba este lunes, cuando la economía y el desempleo han mermado su popularidad a los niveles más bajos de su mandato, mientras los republicanos han comenzado su ofensiva para las elecciones de 2012.
Iowa será el primer destino de este tour de tres días por el Mediooeste, en el que el presidente desempolvará su mensaje de “esperanza” con el que llegó al gran público en las elecciones de 2008 para tratar de dar un impulso a su imagen.
Este estado, de gran producción agrícola, es clave en la campaña electoral, ya que es uno de los primeros en votar en las elecciones primarias y suele marcar la tendencia de los votantes.
Hasta allí se desplazaron este fin de semana los aspirantes a la candidatura republicana para participar en una consulta informal entre sus votantes para medir sus posibilidades y alentar al público a participar en las elecciones para que Obama sea “un presidente de un solo mandato”, reiteró la congresista Michele Bachmann.
Obama emprende el viaje a las comunidades rurales de Iowa e Illinois en autobús, un medio que han utilizado con cierto éxito mediático algunos de sus opositores como la exgobernadora de Alaska, la republicana Sarah Palin.
El mandatario discutirá sobre cómo hacer crecer la economía para fortalecer la clase media y acelerar la conexión de las comunidades rurales de todo el país “directamente” con los estadounidenses. “El presidente sabe que tenemos que hacer todo lo posible para promover el crecimiento económico, restablecer la confianza en el futuro de nuestra nación y mejorar el sentimiento de optimismo para las generaciones futuras”, indicó la Casa Blanca.
La primera parada era en la localidad de Decorah, para mantener un encuentro con ciudadanos, en la sede de la organización sin ánimo de lucro dedicada a la conservación agrícola Seed Savers Exchange.
Al día siguiente continuaba rumbo a Peosta (Iowa) para participar en un Foro de Economía Rural en el Colegio Comunitario del Noreste de Iowa.
Según el director de Comunicaciones de la Casa Blanca, Dan Pfeiffer, Obama no pretende “dar un gran discurso de política económica” en ese foro, pero sí “intercambiar ideas con granjeros, agricultores y propietarios de pequeños negocios”.
La economía se ha convertido en el talón de aquiles de Obama, cuya situación parece no mejorar tras las turbulencias económicas generadas después de que Standard & Poors degradara el pasado viernes la calificación de la deuda estadounidense de “AAA” a “AA+”.
“Tenemos todavía un largo camino por delante para llegar donde tenemos que estar. No llegamos a esta situación de la noche a la mañana y nos va a tomar tiempo salir de ahí. Esta es la dura verdad, pero no hay excusa para no actuar”, dijo el presidente en su discurso radiofónico semanal.
Obama empezará la gira con unas cifras de popularidad por debajo del 40%, según la encuesta diaria de la consultora Gallup, y tras encajar otro revés después de que el pasado viernes un Tribunal de Apelaciones en Atlanta (Georgia) declarara inconstitucional una parte de la reforma del sistema de salud.
La anulación de la reforma sanitaria es uno de los objetivos de la candidata republicana Michele Bachmann, quien introdujo un proyecto de ley para rechazarla por completo y aseguró a sus seguidores que no descansará hasta conseguirlo.
El gobernador de Texas, el republicano Rick Perry, que anunció el sábado su candidatura para las presidenciales, ironizó que a pesar de que Obama habla de recuperación con una desempleo del 9,1% “eso no es una recuperación, es un desastre económico”. “No podemos cuatro años más de esta falta de liderazgo que nos ha llevado a una degradación de la calificación del crédito, de los trabajos estadounidenses, de nuestro lugar en el mundo, nuestra confianza y de la esperanza para un futuro mejor para nuestros hijos”, afirmó.